A mediados del 2015, luego de forjarse como futbolista profesional en las divisiones inferiores del Barcelona, Adama Traoré dejó España y a sus cortos 15 años se mudó a Inglaterra para continuar con su carrera como deportista profesional allí.

Habiendo defendido brevemente las camisetas de Aston Villa y Middlesbrough, el atacante fue transferido al Wolverhampton en agosto del 2018. A partir de aquel entonces, todo indica que el delantero rompió el cascarón y comenzó a desatar su potencial en la Premier League.

Pese a que se destacó por su accionar vistiendo la camiseta de los Lobos, Traoré también levantó miradas y generó un foco de atención sobre él por el imponente físico que desarrolló con el paso de los años.

En diálogo con Chiringuito de Jugones, tomándose con humor la situación, el goleador lanzó una llamativa confesión y aseguró que "no hace pesas". "Sque es difícil de creer, es genética", agregó al hacer referencia al origen de su estado físico. 

Entrando en detalle y haciendo mención a las complicaciones que le genera poseer un porte tan robusto, el futbolista agregó: "Sé que soy bastante grande para ser futbolista. Hago ejercicios, pero no mucho porque me pongo grande muy rápido".

Cabe indicar que, fruto de su gran presente en la liga de Inglaterra, Traoré fue posicionado en el radar de varias instituciones del Viejo Continente para reforzar las filas de sus correspondientes equipos.