Después de este accionar, no nos queda más que imaginar que Jan Bořil tiene un problema personal con Lionel Messi.

Pasa que la imagen es muy clara: el jugador del Slavia Praha lo esperó a Lionel Messi para pegarle.

Al estar al lado de la Pulga, le metió un codazo en la panza y el árbitro decidió sólo sacarle amarilla.

El Barcelona gana 2-1 de manera parcial, buscando quedar punteros del Grupo F en esta Champions League.