Primero fue Cristiano Ronaldo, luego Sergio Ramos y ahora Lionel Messi. El campeonato de primera división en España se prepara para tiempos de crisis no conocidos en los últimos 20 años. La ausencia de cracks para la temporada 2021/2022 y la dificultad que de momento se encuentra para traer a estos a la península suponen el final de: “LaLiga de las estrellas”, tal y cómo la conocimos.
“Lionel Messi no continuará ligado al FC Barcelona. Las dos partes lamentan profundamente que finalmente no se puedan cumplir los deseos tanto del jugador como del Club”, dictaba el comunicado del equipo Culé sobre la última estrella que abandona LaLiga luego de varios años por no decir décadas donde los mejores jugadores de este deporte solo querían jugar en España.
Es cierto que la Premier y su ingeniería financiera son una constante amenaza. Es cierto que los clubes estado cómo PSG o Manchester City pagan cantidades que ni siquiera Real Madrid o Barcelona tienen. Es cierto que la competencia y rivalidad de los últimos años ha desgastado varias relaciones entre clubes y jugadores. Todo esto es verdad, pero igualmente lo es la falta de un plan para evitar una fuga de talentos que en este momento, tiene a LaLiga más huérfana que nunca.
Neymar, CR7, Sergio Ramos, Raphael Varane, Diego Costa, Keylor Navas y ahora Lionel Messi fueron abandonando España para embarcarse en otros desafíos donde la presión y la ganancia económica era otra. Llegaron pocos o ninguno para sustituirles, lo que nos ha llevado a un torneo que para la temporada que arranca en una semana, no tiene un fuera de serie que venda el producto en el mundo entero.
¿Griezmann? ¿Benzema? ¿Luis Suárez? Todos son espectaculares jugadores, pero no tienen el impacto de los nombrados anteriormente. Incluso el fichaje de Mbappé podrá compensar poco o nada la fuga de cracks que viene sufriendo España en el último tiempo. Oficialmente y tras la salida de Lionel Messi, podemos afirmar que hemos visto el final de: “LaLiga de las estrellas”.