El país se paralizó. Todos los argentinos estaban frente a su televisor esperando por la tanda de penales. El que estaba listo hace rato era Emiliano Martínez, el arquero que se vistió de héroe durante todos los tiros desde los 12 pasos.
Con mucha valentía, se enfrentó a todos los jugadores de la Selección Colombia y antes de que pateen, les habló, los puso nerviosos y logró su cometido: atajó tres de cinco remates en total, siendo el último ante Edwin Cardona.
Al de Boca también le adivinó el lado y al instante llegó la corrida de sus compañeros, encabezada por Lionel Messi, para festejar el pase a la gran final de la Copa América, que será ante Brasil en el Maracaná.
Una verdadera demostración del portero bajo los tres palos, acompañada de la efectividad de sus compañeros, que metieron todos los goles menos el de Rodrigo De Paul.
