Más allá de la victoria sobre Barracas Central, otra de las grandes noticias que tuvo Boca el sábado por la noche fue el regreso de Carlos Izquierdoz a las canchas. El defensor se había quedado afuera del equipo por un largo tiempo debido a su dura lesión, pero ya está en condiciones y por eso regresó.
Sin embargo, preocupó verlo salir a los 33 minutos del segundo tiempo. Pero el propio futbolista se encargó de tranquilizar a los hinchas: “Me puse un poquito de hielo, pero normal, para que no se inflame. Por suerte respondió bien el pie, en algunos apoyos, nomás… Molestias normales por la fractura, pero estoy contento porque hicimos un buen partido”.
El “Cali”, de todas maneras, confesó en TNT Sports que su recuperación tuvo un momento complicado en el tramo final. “El sábado pasado hice un reducido y les dije a los kinesiólogos: ‘Así no puedo jugar ni de cerca…’. Pero fueron pasando los días, me fui sintiendo mejor y jugué. Le agradezco al cuerpo técnico por confiar y a los chicos por bancarme. Tengo que aprovechar estos días para seguir agarrando ritmo, que hace mucho que no jugaba”, afirmó.
Sobre el rendimiento del equipo, el capitán valoró la victoria por todo lo que significa. “Gracias a Dios pudimos cortar la racha de local. Nos venía pasando que nos poníamos en ventaja, nos empataban, sufríamos por momentos los partidos… Nos hacía falta esto, cerrar el último partido de local en esta fase con un triunfo. Esto nos sirve para cargar pilas, agarrar confianza y poder hacer un buen partido en Bolivia“, manifestó Izquierdoz.