No han sido buenas las sensaciones de Fernando Gaviria en lo que va del Giro de Italia ya que la mala suerte y falta de ritmo le ha perjudicado en los finales en los que ha podido ir por la victoria, y este sábado quiso sacudirse sorprendiendo a todos en una fuga, pero nuevamente la suerte le dio la espalda.

Aproximadamente a 37 kilómetros de la meta, que tendrá final en alto, el ciclista colombiano tomó una curva en un descenso demasiado rápido y no pudo girar lo suficiente, para finalmente terminar en el piso contra una de las defensas de piedra que tiene la carretera.

Por fortuna, Gaviria se pudo levantar nuevamente y con gran valentía volvió a unirse al grupo de adelante, que lleva un poco más de 5 minutos con respecto al pelotón de favoritos, que por ahora no ha hecho ningún ataque fuerte.

El carro de asistencia tuvo que ponerle agua en el brazo derecho ya que le salió sangre, pero no parece que le haya pasado algo para lamentar, aunque habrá que esperar al final de la fracción.