Este miércoles se vivieron momentos de pánico en el estadio Doce de Octubre durante el juego entre Cortuluá y Deportivo Cali que dejó como ganador al conjunto local. La hinchada del conjunto ‘azucarero’ invadió el terreno de juego, increpó a sus jugadores y agredió al capitán Teófilo Gutiérrez y al que en su momento era el entrenador, Mayer Candelo. 

Fernando Jaramillo, presidente de la Dimayor, habló en diferentes medios de comunicación y se refirió al hecho presentado en Tuluá: "desde el punto de vista deportivo, tendrá sus consecuencias y los hinchas saben que este tipo de acciones, lo único que hacen es perjudicar aún más a sus clubes, entonces el Comité Disciplinario, con base en la información del comisario y del árbitro, tomará las medidas pertinentes y se estarán informando más adelante". 

En otra entrevista se refirió a las medidas que utilizarían para identificar a los principales actores del suceso: "estamos trabajando de la mano de las autoridades y del Cortuluá para identificar a estas personas, que estaban identificadas con un sistema que tiene el club, con su número de cédula, y judicializarlas, que es lo más importante".

Por otra parte explicó que "queremos identificarlos, judicializarlas y aplicarles una sanción. Lo que se busca es aplicar un castigo ejemplar por parte de los jueces y prohibirles la entrada a los estadios del país. Esto lo único que hace es alejar a las familias e hinchadas de los estadios, en medio de tanto esfuerzo que hacen todos los equipos". 

Pero, ¿qué dice el reglamento? Según el Código Disciplinario Único de la Federación Colombiana de Fútbol en su artículo 83 dice que: “cuando el público invada la cancha se sancionará al club local con suspensión de la plaza de una (1) a tres (3) fechas. Si como consecuencia de la invasión se retardare o impidiere el normal desarrollo del partido, la suspensión será de dos (2) a cuatro (4) fechas”. Finalmente, dicen, “Incurrirá el club en la sanción anterior en caso de que el público agrediere a los árbitros, directivos, personal integrante de los equipos o autoridades, antes, durante o después del partido”.

Al ser culpa de la hinchada visitante, la sanción sería repartida para los dos equipos. El equipo local por ser el club organizador del partido y claramente al Deportivo Cali que se hace responsable del comportamiento de sus aficionados: “los clubes que hagan las veces de visitante serán responsables de la conducta impropia de los espectadores considerados como sus seguidores, de conformidad con el grado de culpabilidad que se logre establecer”.

Estas sanciones ya se han aplicado recientemente, pues esta situación no es nueva. En el primer semestre, se presentó un caso similar en Santa Marta en el clásico entre Unión Magdalena y Junior de Barranquilla. Los hinchas invadieron el campo y se enfrentaron entre ellos. Los dos equipos recibieron sanciones por parte de la Dimayor.