Junior de Barranquilla desperdició una oportunidad de oro ya que no pudo vencer a Independiente Santa Fe, en la última fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores, y nuevamente quedó eliminado del torneo continental de manera prematura y por cuarto año consecutivo jugará la Copa Sudamericana.
El equipo dirigido por Amaranto Perea tenía todo servido para lograr la clasificación ya que dependía de sí mismo y, además, la victoria de Fluminense contra River Plate, le abría toda la puerta a que simplemente con hacer un gol le bastaba para meterse entre los 16 mejores equipos de Sudamérica.
A pesar de que lo intentó de todas las formas, estrelló dospelotas en los palos y uno de los defensas de Santa Fe fue la figura del partido, nada fue suficiente para que el equipo barranquillero y Colombia se quedó sin dos representantes en el máximo torneo de clubes del continente.
Al final se acabó la especulación de que Independiente Santa Fe iba a ir para atrás y dejaría ganar al Junior por simplemente que el país tuviera un representante en los octavos de final, sin embargo se dio una muestra de deportividad y los dos equipos quedaron eliminados.
Fluminense finalmente se quedó con el grupo, River Plate, a pesar de todas las dificultades clasificó a los octavos de final y ahora esperarán sus rivales en la próxima fase de la Copa Libertadores que se jugará en el segundo semestren, luego de que se dispute la Copa América.