Había mucha expectativa por el regreso de Alexa Grasso al octágono de la UFC. La mexicana se había quedado sin su título del peso mosca el pasado mes de septiembre cuando fue vencida por Valentina Shevchenko y, en su primera presentación luego de aquella dura caída, volvió a salir derrotada. Esta vez, perdió ante la brasileña Natalia Silva por decisión unánime en una pelea en la que no le salió absolutamente nada.
Así perdió Alexa Grasso ante Natalia Silva en UFC 315
Desde el primer segundo que Silva mostró sus cartas. En el round 1 se encargó de presionar, ir hacia el frente y no dejar responder a Grasso. Su mano zurda fue la que marcó la diferencia, con sus rectos que impactaban en el rostro de la mexicana casi en su totalidad. Al asegurarse el inicio de la contienda, ya en la segunda vuelta decidió optar más por un estilo contragolpeador, pero no por eso menos efectivo.
Alexa intentaba acercarse, buscar un derribo, pero todo era en vano porque allí aparecieron los ganchos de zurda de una Silva que dominaba como quería las acciones. La mexicana lucía cada vez más frustrada ante la intensidad de su rival que no disminuía en ningún momento y se fue quedando sin respuestas. En el último asalto fue más de lo mismo y así Silva aseguró su séptima victoria de manera consecutiva, mientras que Grasso se llevó la segunda derrota en fila y muchas preguntas en su regreso a casa.
El ranking de la clasificación se verá modificado, por lo que se espera un retroceso de Grasso y un ascenso de una Silva que esperará ser la próxima conteniente al título. Aunque Alexa tiene ímpetu y desea tomar la iniciativa en el medio del octágono, lo cierto es que, al menos esta noche, no mostró el poder en sus golpes y por el contrario lució apagada, siendo sorprendida muchas veces por la velocidad de su contrincante.
