Los niños tienen como gran particularidad y característica, la energía que regalan y entregan al mundo, la misma que en ciertas ocasiones los termina llevando hacia la práctica de algún deporte para poder canalizar mejor esos estímulos que se tienen. Para Edgar Chairez el camino fue algo así, ya que desde que era muy pequeño se sintió apasionado por la actividad física. Eso le permitió probar en el futbol y, posteriormente, decidir desarrollarse en el universo de las artes marciales mixtas.
En esta plática exclusiva con Bolavip, Edgar repasa todo su camino que incluye la pérdida alarmante de la visión de unos de sus ojos producto de un accidente inesperado, más la relación con sus padres y el no escuchar los límites para alcanzar sus sueños, que hace tiempo ya está cumpliendo.
El camino comenzó en Mexicali hace 28 años, pero este sábado 14 de septiembre tendrá una página dorada, tal vez la más importante, en La Esfera de Las Vegas cuando Edgar se enfrente en el peso mosca a Joshua Van en Noche UFC, un rival que apareció de último momento tras la baja sorpresiva del peruano Kevin Borjas. Con este panorama, Chairez tiene una gran oportunidad para conseguir su segunda victoria dentro de la compañía y comenzar a pisar fuerte dentro de la organización.
Entrevista completa a Edgar Chairez con Bolavip
-¿Es el evento más grande en el que has estado?
-Con tanto nombre de espectáculo y expectativas yo creo que sí es el más importante y ya he estado en otros eventos grandes, pero lo que se habla de La Esfera, para mi es el número uno en show, etc. Con muchas ganas y ya haciendo los últimos ajustes de peso, estrategia porque tuvimos que ajustar algunas pequeñas cositas por el cambio de rival, pero el plan es casi el mismo
-¿Le dedicaste mucho tiempo de estudio al rival o te centraste en tu estrategia?
–Simplemente te enfocas en si es striker o luchador y ya haces todo el plan. Mi rival es striker y muy buen luchador, pero creo que va a ser una pelea de pie. No es tan fácil tumbarme y si me llevan al suelo yo creo que se les complica más que de pie, así que no creo que me quiera llevar al suelo.
-Tienes una buena oportunidad, ¿Qué expectativas llevas sobre la pelea?
-Para mi es un buen duelo porque tiene tres peleas ganadas en UFC, así que es un bueno para darme un bono y decir que pues ahí estoy. Yo quería pelear con Matt Schnell que es número 11 en el ranking (bajó al 14), pero por cosas me dijeron que no. Igual me ponen un rival duro, pero no es un top, así que vamos a ir a dar un golpe de autoridad para decir presentes y que ahora sí me pongan un top en mi siguiente pelea.
-¿Las finalizaciones en el primer asalto son todas buscadas o simplemente se dan?
-Siempre es una circunstancia que se da, incluso he peleado dos o tres veces a cinco rounds y todos dicen: “No, los peleadores de un round si los llevas al segundo pierden’, pero no. Me han llevado al segundo asalto, tercero, cuarto y hasta quinto y mi cardio es igual de bueno. Así somos los peleadores del peso mosca, flacos, tenemos mucho cardio… Y yo soy finalizador porque se encuentra, creo que pego muy duro y tengo mi sumisión muy explosiva, por lo que puedo encontrar la finalización en cualquier momento. Pero ya estamos en UFC, estamos un poco más técnicos, más lentos… No porque lo seamos, sino que estamos buscando el espacio y la manera correcta de conectar. Aquí un error te puede costar la pelea y todo el campamento.
-¿Hiciste algún enfoque en particular en todo lo que será el evento a nivel show?
-Pues fíjate que sí, porque ya me han tocado los últimos tres eventos que fueron similares y me han dejado estar ahí. Entonces, toda la expectativa y el apoyo va para mi porque es un evento mexicano. Pero no te puedes confiar en nada, el público es el público y quieras o no, se cierra la jaula y es tu rival contra ti y él te puede mandar a dormir. Tengo mentalizado que voy a recibir cierto apoyo, pero bueno, yo pongo la cereza del pastel de esa pelea.
-Yendo al inicio del camino, las artes marciales no eran una prioridad en tu vida, sino que probaste con otros deportes…
-Así es, como todo mexicano empecé en el futbol, ja. Antes del boxeo siempre empiezan en el fútbol y pues el deporte de contacto de México es el boxeo, ahí me fui… Antes del boxeo, empecé en la calle peleándome por peleonero, je. Siempre destaqué en todo el deporte. Creo que mi favorito es el futbol todavía, aunque me dedico a las artes marciales, entonces se dan un empate y están igualados porque es el lo que me da de comer. Estoy entre los mejores peleadores del mundo, pero sigo con un cariño grande al futbol.
-¿Cómo fue el accidente que tuviste en uno de tus ojos?
-Sí, de hecho el accidente fue el futbol a los 11 años. Me dieron un balonazo, yo era delantero, iba peleando una bola con el portero y para ganármela la despejó y me la dio justo en la retina, que se me desprendió. Entonces, ya me dejaron afuera de los deportes y mis papas se hicieron algo cohibidos en no dejarme hacer nada, pero yo me aferré porque el deporte siempre ha sido lo que yo más quiero. Pero sí, perdí como el 40, 50% de la visión del ojo izquierdo. Ahorita, pues no miro, pero ya me acostumbré, ya es algo normal. Ya no recuperé y así se quedó porque es una cicatriz en la retina. Eso fue a los 11 años, así que pude adaptarme a la vida normalmente y claro que no miro de un ojo, pero da igual, ya me acostumbré, tengo mi enfoque igualito.
-¿Eso no te afectó a la hora de luchar?
-No, para nada. Ni siquiera peleaba cuando me pasó eso, así que no podría decirte como fuera si peleará después de ese accidente. Pero yo empecé así, me acostumbré y así siempre he peleado y me ha ido muy bien, así que… Si así soy muy bueno, si tuviera mejor visión sería mejor, ja.
-¿Y cómo convenciste a tu familia de ser un artista marcial?
–Los convencí con resultados, pero en sí ellos no quisieron nunca hasta que yo tuve la mayoría de edad y me fui de mi casa, que ya fue cuando me dediqué 100%. Empecé como a los 16, 17 años en gimnasios de boxeo y se molestaban cuando se daban cuenta que yo iba a entrenar por mi ojo. Entonces me decían que no, pero a los 18 ya me fui de mi casa buscando el sueño.
-¿En qué momento de tu vida te llega este evento?
-Pues cumpliendo esa etapa de madurez ya mental y físicamente, me estoy siento mejor. Todos piensan que vas de bajada, pero apenas es un pique más alto y ya adaptándonos al peso porque estoy creciendo y cada día se me hace más difícil bajar, pero no pasa de que cambie de categoría y ya, porque mi cuerpo se siente fuerte, mi mente se siente segura y deportivamente ya tengo la madurez para salir a la jaula frente a miles de personas y actuar como un profesional.
-¿Cómo transitas en tu caso el corte de peso?
-El peleador que diga que no le afecta es mentiroso y más en la UFC que usamos cortes tan drásticos y tan grandes. Hay muy pocos peleadores que hacen cortes pequeños y son los pesos más grandes. En mi categoría siempre son cortes grandes y obvio le batallo, me cuesta dejar de comer, es duro, pero a fin de cuentas es trabajo y se tiene que hacer.
-¿Verdaderamente tiene sentido cortar peso?
-Sí, porque al yo subir enfrentaría a otro peleador que naturalmente está cortando más y va a subir más que yo. Es como una esponja, que la vas exprimiendo para el día del pesaje. Ahí tu pesas las esponja y está seca, pero empiezas a inflarla con agua y comienza a absorber y el día de la pelea es pesada y tiene más fuerza, etc. Pero si yo subiera a otra división, fuera una esponja el doble de pesada y así nos vamos yendo hasta el peso supercompleto, pero es lo mismo. Un peleador de una categoría más arriba va a subir el doble, uno de dos categorías más arriba va a subir el triple y así.
-¿Te gustaría que se quite en algún momento?
-No, yo lo miro bien. Hay que hacer sacrificios y está muy bien para las categorías. Imagínate, yo soy flaco, pero mi peso natural fueran 155 libras, en el mundo pudiera pelear con alguien del tamaño de Khabib… Es ilógico. Incluso Khabib, imagínatelo peleando en 220, que es lo que pesa habitualmente. Imagínate a Khabib peleado con Ngannou… Es drásticamente una infinidad de diferencia y por eso son los cortes de peso. Sí pudieran hacer una regla, que no te dejaran subir más de 10 libras, que en las categorías 125 y 135 haya natural, pero lo miro muy diferente, tendrían que cambiar mucho y lo veo muy difícil que lo lleguen a reglamentar acá en Estados Unidos.
-¿Tienes algún objetivo especial para este combate?
–Busco finalizar en todas mis peleas y voy por una nueva, si no se da yo quiero ganar como sea, pero siempre quiero finalizar. Mi estilo es noqueador y, si se fajan, muy pocas veces se aguantan mi pegada y si me tumban muy pocas veces no los someto, así que mis estadísticas son 100% finalizadoras. Yo por lo único que voy es por mi victoria y para buscar un bono que creo que ya me deben después de varias actuaciones buenas que he tenido.
-¿Qué mensaje le dejas al público que te estará viendo?
-Quiero invitarlos este 14 de septiembre. Es un evento en honor a nosotros, los mexicanos, los aztecas y no se lo pierdan porque va a haber encuentros increíbles, vamos a dejar nuestra raza, nuestra sangre ahí y va a ser un evento espectacular, único y pues no se lo pierdan. Acompáñennos, mándennos todas sus energías mexicanas…