El titular del Tribunal de Disciplina anticipó que no habrá castigo de oficio para Carlos Tevez, más allá de los antecedentes de casos similares en que se recurrió a esta sanción.
El fútbol argentino está cuidando al ídolo de Boca. No porque éste se merezca un castigo excesivo ni ser demonizado con la condena favorita del público futbolero, la del “mala leche”, pero sí porque se lo ha intentado lavar de culpas que él mismo se adjudica. “Tuvo la desgracia que quedó enganchado en su suela”, dijo, sobre el lesionado Ham, el comentarista del partido entre Argentinos Juniors y el xeneize. Pero el futbolista tuvo la desgracia de que Tevez le metiera con excesiva dureza, acción que el propio delantero reconoció, afligido.
Juzgamos por igual a uno de Almirante Brown, Flandria o Boca. No nos fijamos en la camiseta
El fútbol argentino está cuidando al Apache porque, teniendo las herramientas necesarias para proceder a la sanción de ofició de un futbolista que se equivocó -no mató a nadie, pero se equivocó- decidió pasar la página cuanto antes a la espera de que una nueva noticia calienta, que siempre las hay y siempre de las malas, cambie el foco de las miradas.
El fútbol argentino está cuidando a Tevez porque hay antecedentes que marcan que, en casos similares, el Tribunal de Disciplina decidió castigar a jugadores que no tuvieron la suerte de tener un nombre de tanto peso. Pasó, por última vez, en febrero de éste mismo año, en un partido entre Dock Sud y Talleres de Remedios de Escalada, cuando José Nápoli le cometió una violenta falta a Lucas Ferreiro, ocasionándole la fractura de la tibia, peroné y dejándole comprometido el ligamento. La sanción, de oficio, fue de cinco fechas. Pasó, también, con Hernán Buján, de Independiente; Germán Basualdo, de Argentinos, Mauro Camoranesi, de Lanús, y otros tantos; pero no pasará con Tevez.
“Nosotros no actuamos de oficio. Es la posición mayoritaria y la jurisprudencia de los últimos 20 años. Con Vangioni, cuando lastimó a Pavón en el verano, tampoco lo hicimos. Y por eso no vamos a sancionar a Tevez como no lo hacemos con ninguno”, dijo Fernando Mitjans, utilizando como coartada el perdón a otro poderoso como si se tratara del único antecedente que existió en las últimas dos décadas. A veces parece que no sólo se trata de Tevez.
+La lesión de Ezequiel Ham
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