Consumada la clasificación Cafetera, el hombre de Real Madrid rompió en llanto y emocionó a todos. Además, el plantel colombiano consoló a Cueva, uno de los que falló para Perú.

Muchas veces el fútbol entrega episodios para el olvido. Sin embargo, en el encuentro entre Colombia y Perú, se vivieron varios de esos que deben quedar en el recuerdo. Mucha emoción y grandes gestos en la clasificación Cafetera a las Semifinales de la Copa América Centenario.

Una vez conseguido el pasaje, James Rodríguez, uno de los que convirtió en la definición por penales, rompió en llanto y emocionó a todos. Posteriormente, el plantel colombiano se encargó de consolar al peruano Christian Cueva, que falló su disparo. Para el aplauso.

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