Emocionante: vistieron de médico al Cristo Redentor

Un domingo de Pascua más que especial para el mundo entero. El coronavirus provocó que todos pasemos las fiestas encerrados en nuestros hogares, lejos de nuestras familias, amigos, seres queridos. Pero bueno, las redes sociales colaboraron para que todos podamos sentirnos un poco más cerca, manteniendo el contacto por videollamada o de la forma que sea. Y en este contexto, cualquier señal de esperanza, de unión, es más que bienvenida. Bien lo saben en Brasil, que brindaron un espectáculo que fue filmado y distribuido a todo el mundo en cuestión de minutos.

Se trató de un show de luces que se reflejó nada más y nada menos que sobre el Cristo Redentor. En Río de Janeiro, un digno homenaje a todos los trabajores de la salud del planeta que están día a día luchando allí afuera para frenar el avance de la pandemia fue realizado. Las imágenes no tardaron nada en llegar a todos los continentes, ya que no solo la icónica estatua fue “vestida” de médico, sino que varias banderas fueron reflejadas sobre la misma, entre otros efectos más. Da piel de gallina tan solo pensar en lo inmenso de dicha producción.

Ya que todas las iglesias están cerradas por la cuarentena obligatorias, la cual impone que solo se puede salir a las calles para hacer compras esenciales y volver, el cardenal Orani Tempesta se encargó de realizar una ceremonia a los pies del monumento, en soledad y con toda la ciudad por debajo de sus pies. Entre otras cosas, sobre el Cristo también se vieron alabras de aliento como “gracias” y “esperanza”, mientras que al final quedó impresa la frase:“Quédense en casa, por nosotros, por todos. Estamos juntos”. Verdaderamente impactante.

Hoy en día en el territorio brasileño se registran unos 22 mil casos de Covid-19, teniendo casi 1300 muertes. A nivel global cada vez el número de afectados se acerca más a los 2 millones, mientras que las víctimas fatales ya son casi 115 mil. Siguen siendoEstados Unidos el país con la situación más delicada, teniendo aproximadamente un cuarto de los casos de infectados y un sexto del total de decesos en todo el mundo. Una verdadera locura. Lo siguenItalia y España, que con sus medidas estrictas de a poco logran aplanar la curva y mejorar el panorama.

Esperemos que pronto termine esta locura y cada uno pueda volver a su rutina. Más allá de todo lo malo que sucedió a causa del coronavirus, habrá que buscar la forma de rescatar los aspectos positivos. Será tiempo de aprender que no todo lo que siempre pensamos como necesario lo es, de valorar mucho más el tiempo que pasamos con el otro porque no sabemos cuándo dejaremos de tener la posibilidad del encuentro, de darle un lugar mucho más relevante a la higiene y el cuidado diario de nuestra salud, entre muchas otras cosas más.