El pasado 21 de noviembre, el mundo de la NBA lamentó la muerte a los 54 años de Rodney Rogers, jugador que se desempeñó en la mejor liga de básquet del mundo durante doce años de su carrera, vistiendo las camisetas de Denver Nuggets, Los Angeles Clippers, Phoenix Suns, Boston Celtics, New Jersey Nets, New Orleans Hornets y Philadelphia 76ers.
Nacido en Durham, Carlonia del Norte, destacó en la Universidad de Wake Forest siendo elegido Novato del Año en 1991 para la Conferencia de la Costa Atlántica y Jugador del Año en 1993, siendo luego elegido en el pick número 9 del Draft de la NBA por los Nuggets.
Su explosión comenzó con Los Angeles Clippers, equipo al que dedicó cuatro temporadas en gran nivel, pero fue su paso por Phoenix Suns lo que le permitió ser elegido en 2000 como el Mejor Sexto Hombre del Año, con 104 puntos sobre 121 posibles en la votación, gracias a un promedio de 13,8 puntos, 5,5 rebotes y 3,8 asistencias por partido saliendo desde el banco.
Durante nueve de las doce temporadas que permaneció en la NBA logró jugar los playoffs con sus respectivos equipos, pero nunca logró conquistar títulos, incluso habiendo integrado el plantel del máximo campeón en la historia de la competencia en 2002: Boston Celtics. Ese paso no fue bueno y a mediados de año partió como agente libre a New Jersey Nets, lo que marcó el ocaso de una carrera a la que puso punto final en 2005, jugando para los 76ers.
El accidente que cambió su vida
Tres años después del retiro, cuando trabajaba como supervisor de operaciones de maquinaria pesada para el Ayuntamiento de Durham, su ciudad natal, sufrió un gravísimo accidente en motocicleta cuando circulaba por una zona rural del condado de Vance, en Carolina del Norte. Pese a ser trasladado a un centro médico especializado en rehabilitación de lesiones en le médula espinal y cerebrales, Rogers quedó paralizado de los hombros hacia abajo, con un diagnóstico de tan solo cinco por ciento de probabilidades de volver a caminar.
Ejemplo de resiliencia
La severa lesión que sufrió Rodney Rogers dio lugar a la creación de una fundación que lleva su nombre, en la que alentaba a personas que sufren parálisis similares promoviendo la resiliencia y el crecimiento personal. Wake Forest, universidad en la que destacó como deportista en su juventud, le había dado el Premio al Alumno Distinguido en 2022, junto con un título honorífico.
El legado que siguieron sus hijas
Roddreka y Rydeiah, las dos hijas que tuvo Rodney Rogers, continuaron con el legado de su padre y se abrazaron al básquet. La primera se convirtió en técnico asistente del equipo femenino de Georgia State, tras haber jugado también allí. La segunda jugó al baloncesto universitario en NC State desde 2015 a 2019.
En síntesis
- Rodney Rogers falleció a los 54 años el 21 de noviembre pasado.
- Rogers jugó doce años en la NBA y fue Mejor Sexto Hombre del Año en el 2000 con Phoenix Suns.
- En 2008, tres años después de retirarse, Rogers sufrió un grave accidente en motocicleta.
