El 19 de septiembre pasado, en medio del partido entre Paris Saint-Germain y Olympique de Lyon, Lionel Messi fue un protagonista excluyente pero no por una obra de arte, tal como nos tiene acostumbrados a todos, sino por un episodio que no querrá recordar. Es que Mauricio Pochettino lo sacó del campo de juego y él no reaccionó de la mejor manera.
En ese momento, todos los cañones apuntaron hacia la figura del director técnico del conjunto parisino. Sin embargo, posteriormente se conoció la noticia de que el astro de 34 años de edad, recientemente campeón de la Copa América con la Selección Argentina, tenía una lesión producto de un golpe. Allí las aguas se calmaron de forma contundente.
En ese contexto, Messi no fue convocado para el siguiente partido de PSG pero sí para el de este martes, correspondiente a la fase de grupos de la presente edición de la UEFA Champions League. Un duelo trascendental en el que el poderoso conjunto francés se encontrará frente a frente con el Manchester City de Josep Guardiola.
El ídolo máximo de toda la historia de Barcelona ingresó en la convocatoria de Pochettino y allí comenzaron los interrogantes. Algunas informaciones indicaban que Messi ocuparía un lugar en el banco de suplentes y otras tantas exteriorizaron que estaría desde el arranque. Sin embargo, el misterio se develó poco antes del comienzo del juego.
Por intermedio de sus redes sociales oficiales, Paris Saint-Germain confirmó la alineación que saldrá al verde césped del mítico e importante estadio capitalino. Y, para alegría de todos los amantes del deporte más hermoso del mundo, quedó absolutamente claro que Messi será titular, precisamente ante el equipo de su amigo Guardiola.
