Daniel Osvaldo, como todo futbolista argentino, es un maradoneano de ley. La pasión por Diego Armando Maradona nació desde un primer momento y la vida lo llevó a cruzarse en el camino del “10”: lo conoció, tuvo una gran relación y hasta fue pareja de Gianinna, una de las hijas del ídolo.

En una entrevista en “Urbana Play” le preguntaron al exdelantero de Boca cuál era su Diego favorito de todos los que se conocieron. “Mi Diego favorito, el que me emociona, es el de la época cuando lo conocí: en la época de la Noche del Diez. Estaba impecable, hermoso, divino. Pero todos los Diegos son buenos. Hay veces en que se necesita ser el Diego en Cuba también”, reconoció.

Y ahí contó cómo fue el momento en el que vio por primera vez a Diego. “Lo conocí gracias al Vasquito Olarticoechea, que me llevó a la casa de los padres de Maradona en Devoto. Me dijo que iba a la casa de un amigo, no me contó. Yo no tenía ni idea. Cuando tocamos el timbre, abrió la puerta él y me puse a llorar automáticamente, me temblaba todo el cuerpo”, relató.

Creer o reventar, mientras Osvaldo hablaba de Maradona, una mariposa se posó en su micrófono y él no dudó: “Hola, Diez”. “Yo creo en estas cosas”, agregó el exjugador. Luego sí terminó con la anécdota y comentó lo que le dijo Diego: “¿Qué haces, Dani? ¿Todo bien? Jugaste bien el otro día, eh, te tendría que haber puesto más tiempo tu técnico”. Él aún recuerda con mucho cariño ese momento: “Yo no lo podía creer. Lo más hermoso de él era que te hacía sentir que era igual a vos, no te miraba de arriba”.