Cobreloa hipotecó las opciones de seguir en la categoría de honor del fútbol chileno. El cuadro loíno empató 2-2 ante Universidad Católica por la fecha 29 del torneo y su descenso es inminente.
A pesar de que tiene opciones matemáticas para permanecer en la división, lograr la hazaña sería milagroso. Y es que deben vencer a O’Higgins y dejar atrás la diferencia de 16 goles que hay entre ambas escuadras.
Un panorama sombrío para el equipo de Calama, lo que fue lamentado por Paulo Flores. El histórico relator conversó con BOLAVIP CHILE y confesó toda su pena por el empate en el Estadio Zorros del Desierto.
“Hace poquito me sequé las lágrimas, usted saben que muy sensible, un relator muy sensible. Hoy sí, estoy de cumpleaños y si no es por mi familia, por la contención y la fuerza que me han dado, sencillamente, no sé…”, indicó.
“Estoy muy apenado. (…) Algunos dirán matemáticamente aún hay opciones, hay que hacerle nueve goles a O’Higgins en Rancagua. Ninguna posibilidad”, agregó Flores.
A pesar de ello, agradeció el esfuerzo del cuerpo técnico. “En cuatro partidos, le trató de cambiar absolutamente el espectro futbolístico a Cobreloa. Se lo hizo con Copiapó, pese a ser goleado con Iquique demostró algo”, lanzó.
En dicha línea, agregó: “Hoy (sábado), en media hora pudo haber cambiado el asunto, pero había que apuntarle al arco. No se pudo con Católica, un equipo que siempre nos costó en Calama.
El terror de Cobreloa
Finalmente, el crack del relato envió un potente mensaje por el comienzo de una pesadilla permanente: un nuevo período en Primera B.
“Sepultamos un malo año, que comenzó mal, pésimo. Mal armado el equipo. Algunos dirán que no hay que llorar sobre la sangre derramada, pero siempre dijimos lo mismo”, cuestionó.
¿Responsables? Flores aseguró que fue por “equivocaciones de dirigentes, de cuerpos técnicos, malas elecciones de jugadores”.
“¿Cuál es el problema? Pasamos a ser equipo ascensor. El cuarto grande del fútbol chileno se va a la B y la pena que tengo como cobreloíno, que en todo caso siempre vamos a estar ahí, apoyando en buenas malas”, reflexionó.
“Fuerte abrazo a toda esa gran hinchada, porque la hinchada de Cobreloa está en todo Chile. Descendimos, sí, pero hay que aperrar: hay que volver pronto”, concluyó.