Volvió el capitán. Claudio Bravo se reencontró con la Selección Chilena tras meses de no estar en el equipo de todos y por primera vez bajo el mando del entrenador, Eduardo Berizzo.

Bravo, de inestable arranque de temporada por lesiones que lo han afectado y que no ha podido tener más continuidad en el Real Betis de Manuel Pellegrini, se integró a las trabajos de La Roja esperando los duelos amistosos frente a Polonia este miércoles y Eslovaquia el domingo próximo.

En la antesala del compromiso en Varsovia, Bravo fue consultado si le sorprendió esta convocatoria por parte del Toto, ya que no estuvo en los duelos del pasado mes de septiembre ante Marruecos ni ante Qatar. 

"Siendo sincero, no. No, porque si hablamos de rendimiento y te toca participar donde a mi por lo menos me toca hacerlo, los hechos hablan muchas veces por sí solo", se sinceró el portero.

Pero Bravo es aterrizado y argumentó que de todas maneras, a él no le gusta estar en La Roja si es que no está en un buen nivel para pelear el puesto. "Tampoco me ha gustado venir acá con la situación de no jugar, de no estar compitiendo, de no estar haciendo bien las cosas dentro de mi club. Creo que no sería un premio, un estímulo para mi en ese sentido".

Bravo es citado por primera vez en la Era Berizzo (Gettyimages) 

Agregó que "creo que esto debe servir para todos. El que venga acá tiene que estar al más alto nivel, es la única forma que podamos tener una selección competitiva, una selección al nivel que nosotros llevamos muchos años haciendo esto", poniendo tarea a sus nuevos compañeros. 

Finalmente, reconoció que si Chile no fue al mundial es básicamente porque las cosas no se hicieron bien y que cada uno no aportó lo necesario, apuntando a jugadores, cuerpo técnico e incluso directivos.