Jaume Munar y el verdugo de Nicolás Jarry, Arthur Fils, protagonizaron un apasionante y extenso encuentro por la segunda ronda de Roland Garros 2025. Finalmente, el tenista francés se llevó el triunfo por 7-6(3), 7-6(4), 2-6, 0-6 y 6-4 en 4 horas y 30 minutos en el Court Suzanne Lenglen.
Durante el partido, el tenista español tuvo que convivir con un ruidoso público francés. Tras el partido, el mallorquín se desahogó con todo: “Voy a ser muy claro y no tengo por qué morderme la lengua. A mí que animen al otro, que chillen, ya estoy curtido y entrenado en eso porque en Sudamérica también son muy duros. Lo que me parece una falta de respeto absoluta es no parar de cantar y no parar de interrumpir”.
El profesional de 28 años se mostró muy incómodo: “No dejan que el juego avance. Ya no es que me afecte o no. Parece un show, que es muy bonito para el espectador, pero estamos aquí para hacer nuestro trabajo. Lo que no puede parecer esto es un circo y hay veces que parece un teatro”.
Munar aseguró que el público no dejó de hacer cosas para incomodarlo: “Es que es una, otra y otra. Que si cantan el himno, que si no te dejan sacar, que si entre saques no paran de hacer tonterías para molestar. Al final si hago una doble falta es mi culpa”.
¿Roland Garros tiene el público más molesto?
El tenista (57 del mundo) que vive quizás su mejor momento de su carrera a nivel resultados, mencionó que en Roland Garros está el espectador más desagradable: “Es el público más molesto, así de claro. En Nueva York es un espectáculo todo y la gente lo vive como un espectador y no desde el fanatismo”.
En ese aspecto, se siente mucho más cómodo en otros Grand Slam, como el US Open: “Yo siempre he dicho que en Estados Unidos disfruto mucho jugando. Es un show. Jugué contra (Gael) Monfils y disfruté, a pesar de que estuvieron animándole a él todo el rato. Y en Australia es más de lo mismo. Aquí la bandera pesa demasiado. Se podrían calmar un poco y que el juego transcurriera de una manera más normal”.
¿Qué viene para Jaume Munar en el circuito?
El español ahora se enfocará en la gira de pasto. En ese sentido, está a 10 bajas de ingresar al ATP 250 de Stuttgart y a nueve del ATP 250 de s-Hertogenbosch, torneos que tienen un corte muy alto en la semana del 9 de junio.
Luego está anotado para la clasificación del ATP 500 de Halle (que se jugará el 16 de junio el cuadro principal) y posteriormente competirá en casa, en el ATP 250 de Mallorca la semana del 23 de junio, en lo que será su estación previa a Wimbledon.
