César Pinares no ha brillado lo que se espera en la Universidad Católica. El mediocampista es uno de los pilares de Ariel Holan y fue el mismo técnico que lo convenció de retornar desde Turquía para jugar otra vez en los cruzados. Sin duda, el semestre no ha sido de los mejores y el volante asume la responsabilidad.
Pinares es uno de los experimentados de la UC, aunque ha estado lejos de descollar como en torneos anteriores. El volante no rehuye a la autocrítica y el mismo realiza la propia en duros términos, ya que sabe que no ha dado en el tono en su estadía por San Carlos en 2023.
“A veces me paso de la raya, porque no me hago la misma autocrítica. Es más, en las malas me castigo mucho más y en las buenas veo que todo es normal, que es normal ganar, pero no lo veo así cuando perdemos. Siento que exagero un poco más y eso me lleva a exigirme muchísimo más”, explicó Pinares.
Pinares sabe lo que es rendir a un alto nivel y por eso desde joven fue a Europa, jugó en Brasil y logró estar en la UC y en Colo Colo acá en el fútbol chileno. El volante sabe que es importante tener autocrítica, aunque sea descarnada.
“A nivel de plantel nos exigimos al máximo, porque no es grato para nadie perder y menos en un clásico. Es buena la autocrítica, nos hace bien para poder crecer y cuando las cosas no resultan hay que saber encontrar el punto exacto para mejorar y crecer”, añadió el volante.
Pinares está enfocado en hacer bien las cosas y es firme a su convicción. El autoanálisis resulta para él y lo lleva a elevar su nivel personal en favor del grupo. “El saber lo que uno hace mal ayuda a mejorar más en los entrenamientos y todo eso sirve para ver qué cosas debemos mejorar en los partidos”, terminó.