Iba el minuto 73 del partido cuando el clásico Unión Magdalena vs. Junior de Barranquilla tuvo que cancelarse por falta de garantías. El partido de la Costa Caribe se vio manchado nuevamente por la violencia en los estadios, el Sierra Nevada vuelve y juega y es el escenario donde se vivieron momentos de pánico.
Al principio, se comenzó una pelea en las gradas entre las barras de Unión Magdalena y Junior de Barranquilla, luego, las voces iban aumentando y ya se comenzaron a tomar la gramilla, la Policía hizo la respectiva intervención mientras que los jugadores de ambos equipos entraban al camerino. El partido ya era difícil que continuara.
Luego, se conoció que a varios hinchas les tocó resguardarse en rincones del estadio Sierra Nevada mientras la pelea continuaba. La buena noticia es que no se conocen heridos de gravedad pero sí algunos detenidos a los que se les acusa de incitar a la violencia. Minutos después, fue oficial que el partido no se jugaba más.
Lamentable momento que empaña el fútbol colombiano otra vez y aleja a la gente de los estadios. Durante el cubrimiento, un jugador de Unión Magdalena se vio preocupado por su madre que sufre de nervios y estaba en las gradas. Una fiesta que debería ser de alegría se ve manchada otra vez por el vandalismo.