Uno de los personajes del año fue la argelina Imane Khelif. La boxeadora se quedó con la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de París 2024 y allí despertó una polémica mundial porque se puso en duda su verdadero género, ya que había quienes la acusaban de ser un hombre compitiendo en la rama femenina. Esa polémica parece haber quedado bastante atrás y en las últimas horas recibió un premio como atleta mujer junto con otras estrellas del deporte.
Acompañada en la terna por Simone Biles de gimnasia artística y Catlin Clark de baloncesto, la africana de 25 años fue condecorada como una de las tres mujeres atletas más importantes del último año. Esta votación sirvió para que la pugilista deje atrás una lucha que llevó adelante y que sigue sosteniendo hace meses en relación a quienes ponen en duda su verdadero género e identidad.
La polémica se instaló en las redes sociales luego de la elección de la agencia Associated Press que decidió valorar la resiliencia y fuerza de Khelif para reponerse y superarse a sí misma en los momentos en los que la gran mayoría del mundo del deporte estaba en contra de su participación en los Juegos Olímpicos.
Esto, como se dijo, generó el repudio de muchos usuarios que van en contra de la explicación científica que alega que Khelif no es un hombre, sino que su condición explica que tiene cromosomas XY, los cuales son propios del género masculino. Aún así, el debate se ha extendido a lo largo de los meses y la historia continúa dando qué hablar.
La palabra de Imane Khelif luego de ser elegida como mejor atleta femenina
Luego de ser distinguida, Khelif emitió un breve comunicado en el que expresó: “Tenemos trabajo por hacer, amigos”. De esta manera, dio por cerrada una parte de esta novela, pero abrió nuevos capítulos, ya que su intención no es permanecer en el anonimato, sino más bien todo la contrario, teniendo en cuenta que ha manifestado, en más de una ocasión, su deseo de llevar su lucha de discriminación a lo largo y ancho del mundo.
