Se está terminando el año y de a poco todos comienzan a preparar sus copas para brindar en Navidad y Año Nuevo. Ya hay olor a despedida y cierre de ciclos para comenzar con nuevas etapas en el 2025, pero todavía la acción continúa con su ritmo, algo de lo que no está exento el boxeo sin guantes, esta violenta disciplina que este fin de semana dejó una imagen escalofriante.
En la última cartelera del 2024, la vara estaba alta para cerrar el mejor año en una actividad que está en pleno crecimiento. La empresa líder, Bare Knuckle Fighting Championship, solamente creció en los últimos meses y en forma de agradecimiento decidió dejar un evento que reunió a boxeadores de alto calibre para que el espectáculo esté garantizado.
En ese contexto, una de las protagonistas principales fue la cubana Christine Vicens, quien se enfrentó a su tocaya Christine Ferea en el peso mosca. Allí, la pelea fue intensa desde el inicio y ambas salieron a tirar todo lo que tenían desde el primer campanazo. Por alguna razón, en este boxeo, a diferencia del tradicional, los atletas van al cruce sin ningún tipo de dudas y eso genera que el intercambio de golpes sea brutal.
Esto lo dejó reflejado el rostro de Vicens, quien culminó la contienda con una imagen verdaderamente irreconocible. El duelo terminó en el cuarto asalto producto del nocaut que sufrió la cubana que luchó con todas sus fuerzas, pero sin poder alcanzar el cinturón en las 125 libras.
Así quedó el rostro de la boxeadora Vicens
En las imágenes y video se puede ver como Vicens sufrió un castigo tal que su ojo derecho se terminó de cerrar por completo. La inflamación tomó un color morado que generó un imagen todavía más impactante. A esto se le sumaron cortes por varios lugares de la cara y sangre esparcida que terminaron de dar el toque de dureza que faltaba para construir un verdadero rostro desfigurado.
De esta manera, el año en el boxeo sin guantes se fue dejando, sin dudas, una de las imágenes más espectaculares e impactantes de todo el 2024. Lo que se espera es que en el 2025, los profesionales sigan mejorando su técnica y que el deporte siga creciendo de manera tal que la disciplina continúe captando público como lo ha hecho en el último tiempo.