El Wolverhampton ha tenido una temporada bastante mala considerando la gran inversión de dinero que realizaron en refuerzos. La realidad es que su expectativa era pelear los puestos de clasificación a las copas internacionales, pero actualmente están luchando por la permanencia en la Premier League. Es por esa razón que hace algunas semanas contrataron a Julen Lopetegui.
La victoria por 2 a 1 frente al Southampton resulta muy importante debido a que se alejan de la zona de descenso y lograron formar un colchón de puntos importantes. Pero sobre todo, la actitud del equipo fue crucial porque inmediatamente después del gol de Carlos Alcaraz, Mario Lemina fue expulsado por discutirle al árbitro.
Para la suerte de los Wolves, el entrenador español realizó los cambios necesarios y en la segunda parte del encuentro lograron revertir el resultado. Lo extraño de Lopetegui es que Raúl Jiménez ni siquiera fue una opción viable desde el banco de suplentes. El técnico decidió incluir a Diego Costa antes que la mexicano, quien finalmente no vio minutos en este partido crucial.
Lo cierto es que Raúl se encuentra en un momento de sequía y frente al Liverpool lo demostró, ya que desperdició un mano a mano contra Alisson Becker. Además, en las últimas horas comenzó a crecer el rumor de que el club tiene la intención de venderlo en el mercado de verano. Esto se debe a que cuentan con varios delanteros centros y creen que Jiménez cumplió un ciclo.
Más allá de que la Roma de José Mourinho apareció como un posible interesado, todavía faltan varios meses para la finalización de la temporada. Por lo tanto, hay mucha frustración en el mexicano por los pocos minutos que le tocan sumar dentro de la cancha. La situación es complicada y da la sensación de que no mejorará en las siguiente semanas.
