Con la salida de Rodrigo De Paul rumbo a Inter Miami, Atlético de Madrid se desprendió de un jugador que a Diego Simeone le hubiese gustado retener, no solo porque estaba plenamente adaptado a su estilo de juego, incluso cuando era resistido por parte de los hinchas, sino también por el rol de líder que había asumido dentro del vestuario.

En materia de liderazgos, quien comenzó una nueva pretemporada ilusionado con que el club pueda volver a dar ese salto de jerarquía que le permita pelear de igual a igual con Barcelona y Real Madrid, los dos gigantes de LaLiga, es Koke, llamado a ser el capitán del equipo.

“Estoy más motivado que nunca. Es una situación diferente. Tengo la confianza del entrenador. El año pasado me lesioné en el mes fatídico. Me encuentro bien y con ganas. Nos piden que demos un paso más y yo creo que lo puedo hacer. Sé el impacto que tengo en mis compañeros y la confianza que tengo del entrenador”, manifestó en entrevista con El Larguero.

Koke, de 33 años, iniciará su decimoséptima temporada con el equipo al que ha dedicado toda su carrera y con el que lo une un vínculo hasta junio de 2026. Sin embargo, dejó claro que más que un límite temporal hay otra serie de condicionantes para su continuidad o no en el club.

Koke iniciará su decimoséptima temporada en Atlético de Madrid.

“El acuerdo con el club es que mientras cumpla con una serie de requisitos, seguiré. El día que no los cumpla, se acabará. Yo voy a aportar hasta el día que no pueda más y voy a ser el primero en decir ‘hasta aquí llegué’ cuando ya no pueda hacerlo”, remarcó el mediocampista.

Pelear con los gigantes

Koke reconoció que al equipo le faltó a veces determinación y otras veces suerte en el tramo decisivo de la pasada temporada y que por ello la exigencia para el nuevo curso será probarse como equipo que pueden instalarse en el mismo nivel competitivo que Barcelona y Real Madrid.

“La exigencia aquí es más alta. Lo que no sea ahora pelear con Real Madrid y Barcelona será una desilusión. Los refuerzos deben sacar el nivel y el talento que tienen. Los chicos nuevos están compitiendo muy bien. Son gente que viene a sumar. Nuestra exigencia es el máximo. Subir ese peldaño que nos piden ante los dos monstruos que son Madrid y Barcelona. Si tenemos que dar el 200 por ciento, lo daremos. No somos conformistas”, manifestó.