Julián Álvarez está atravesando un momento de reconversión en su carrera como profesional. En el último mercado, el ex River decidió afrontar el desafío de abandonar los laureles del Manchester City para sumarse al Atlético de Madrid, donde el Cholo Simeone le encontró una nueva función para que pueda rendir al máximo de sus posibilidades dentro del esquema que propone el DT.

Corrido del frente del ataque, donde ha demostrado su impresionante capacidad goleadora, el Araña hoy funciona como un extremo por izquierda capaz de hacer ancho el radio ofensivo para luego ser punzante de cara a los tres palos. Gracias al gráfico de OPTA se puede ver cómo la mayoría de las acciones que realizó Julián con pelota fueron mientras se recostó sobre la banda.

Esta nueva posición fue reforzada por Simeone para partidos clave, tales como el derbi de la ciudad contra Real Madrid y el cruce contra Benfica por la UEFA Champions League. En estos encuentros, el Cholo optó por formar con dos puntas y la única garantía fue el infaltable Antoine Griezmann, acompañado por Alexander Sørloth o Ángel Correa.

Lógicamente, el impacto ofensivo de Julián fue menor con estas variantes pero no lo alejó del gol. Sin ir más lejos, desde que el atacante de 24 años conoció su nuevo rol por izquierda a fines de septiembre, logró convertir dos veces (Celta y Real Sociedad) y con Grizi como asistidor en ambos casos, potenciando una sociedad que tiene mucho por crecer y que muestra resultados esperanzadores.

Si dividimos por la mitad los 11 partidos que lleva disputados con el Colchonero, los datos de OPTA indican que en los cinco más recientes aumentó su cantidad de pases clave/pase para remate de sus compañeros de 2 a 5 y su cantidad de intentos de regate de 0 a ¡10!, lo que muestra un mejor aprovechamiento de los espacios disponibles en el campo para hacer el desgaste que acostumbra a hacer. Como es mejor llegar que estar, su nuevo papel lo cargó de una amenaza que no venía representando.

Cómo Scaloni leyó el papel de Julián Álvarez con Simeone

De esta nueva función se aprovechó Lionel Scaloni en el reciente partido entre la Selección Argentina y Bolivia por Eliminatorias, donde el DT le dio vida a un tridente inédito compuesto por Leo Messi, Lautaro Martínez y el propio Álvarez, siendo este último el que se recostó por el carril izquierdo. El resultado quedó a la vista: el de Calchín se involucró en la fase de creación y fue letal por la banda para hacer jugar a los de arriba.

No obstante, por el momento se trata de una excepción a lo que ha sido Julián a lo largo de la clasificatoria mundialista. Según muestra el mapa de calor de OPTA, elaborado con las acciones de Álvarez con la pelota en los pies, el frente de ataque ha sido su hábitat y casi no deja patrones de referencia, esto ideado por Scaloni partido a partido según el planteo.

Quizás lo de Bolivia haya pasado simplemente por el rival y la función del Araña vuelva a cambiar más adelante, o bien es una posición que mantendrá en la Albiceleste en tiempos venideros. Lo cierto es que el delantero ha demostrado rendir en cada puesto en donde se lo exigió y cada entrenador que lo dirija contará con esta garantía. Este es recién el comienzo de una etapa que podría verlo reconvertido como jugador, proceso que atraviesa cualquier futbolista que pasa por las manos de los DTs que marcaron una época como Guardiola y Simeone.