Fin de semana de pesadilla para Franco Colapinto en el Gran Premio de Gran Bretaña de la Fórmula 1. Es que, luego de una clasificación que lo depositó en el fondo de la parrilla y una modificación de último momento que lo obligó a largar desde los boxes, el argentino no pudo competir en el mencionado circuito de Silverstone.
Sucede que, al momento de la largada, el vehículo de la escudería Alpine del argentino de 22 años de edad y oriundo de Pilar, provincia de Buenos Aires, directamente no arrancó. Un nuevo revés para las aspiraciones de Colapinto y también del equipo francés que tiene el experimentado Flavio Briatore como máxima autoridad.
En medio de ese panorama y, como no podía ser de otra manera, Colapinto no se mostró nada contento con el funcionamiento de su auto. Y lo demostró con una reacción más que elocuente, la cual expuso disgusto en un piloto argentino que se encuentra en el ojo de la tormenta y con chances de ser reemplazado por Valtteri Bottas.
“Algo está roto. Dios mío”, señaló el argentino que, en la temporada pasada de la categoría más importante del automovilismo mundial, había sorprendido a propios y extraños a bordo de un auto de la escudería Williams Racing. De hecho, en aquel entonces, había sumado algunos puntos que lo habían puesto en boca de todos.
La reacción de Colapinto
¿Por qué no pudo largar Colapinto?
Lo cierto es que el monoplaza de Alpine sufrió muchas modificaciones en la previa de la carrera y ya sabía que debía salir de dicha zona. Pero a la hora de la largada, el vehículo no arrancó y el piloto argentino se vio notablemente afectado ya que no pudo largar al mismo tiempo que sus competidores. De esta manera, quedó afuera de la competición de este fin de semana.
Los problemas del auto se hicieron presentes debido a que los mecánicos realizaron cambios en gran parte del mismo para esta fecha de la Fórmula 1. Es que como ya sabían que largaban desde la 20° posición, quisieron aprovechar para probar algunas variaciones pero no salió de la manera esperada e incluso mucho peor de lo que se imaginaba como el peor escenario.
De esta manera, Franco Colapinto se quedó sin la posibilidad de poder competir en el Gran Premio de Gran Bretaña, donde iba a largar desde el puesto 20°, por los graves problemas que presentó su vehículo a raíz de las modificaciones que hicieron los ingenieros de Alpine. Por eso, el monoplaza no arrancó y fue sacado del circuito, por lo que abandonó en Silverstone.
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