Hace aproximadamente un siglo, cuando el mundo estaba saliendo de una guerra y comenzaba a meterse en otra, aArgentina se la conocía como “el granero del mundo”. Un término que tranquilamente podría traerse a la actualidad pero cambiando el “granero” por “cantera”. Y hablando en términos meramente deportivos, está claro.

El fútbol argentino es una fuente inagotable de jugadores que nutren y mejoran las ligas de todo el mundo, desde la más chica a la más grande. ¿Por qué? Básicamente “porque todo chico que nace quiere ser jugador”. Sabias palabras de, justamente, uno de esos chicos.

Julián Leandro Gil nació en Misiones y ya desde chiquito sabía cuál era su destino. Desde aquellos primeros goles en el Club Atlético Bartolomé Mitre, hasta cuando pasó por Guaraní Antonio Franco o Crucero del Norte. Un camino que lo llevó a jugar en la fría Dinamarca y en los excéntricos Emiratos Árabes Unidos, una historia que podremos conocer en esta nota exclusiva de Bolavip Argentina con el delantero.

Cortesia Julián L. Gil

Cortesia Julián L. Gil

Decididoa vivir del fútbol, Julián dejó todo en Misiones y recaló en Buenos Aires para estudiar periodismo deportivo y jugar en el Centro de Entrenamiento para Futbolistas de Alto Rendimiento (CEFAR),lugar que le dio la posibilidad de comenzar su aventura.“Estaba entrenando y surgió la posibilidad, ni lo dudé”, comenta recordando el momento.

Un viaje que lo llevaría del calor porteño al frío extremopara empezar bien arriba: “Me fui un 21 de septiembre con el calorcito de acá y cuando llegué hacía -2º. Para colmo estuve unos días en Río de Janeiro”, relata entre risas. Comenzaba “una experiencia nueva” pero que disfrutó, ya que “todo es muy ordenado. Es una vida muy linda y la gente es muy sencilla”.

Sin embargo, y según relató Gil para Bolavip Argentina, no todo fue color de rosas en su arribo.“Cuando me fuí firmépara el Hobro Ik de Superliga, pero el entrenador del equipo no quería extranjeros y por eso termine en el Aabyhöj IF”. Un equipo en el cual comenzó a ganar minutos pero donde no la pasaba muy bien ya que los jugadores “llegaban al vestuario y ni se saludaban entre ellos”.

Cortesia Julián L. Gil

Cortesia Julián L. Gil

En esta institución de la Superliga de Dinamarca,pese a que el entrenador no lo quería, tuvo su oportunidad, aunque surgió un imprevisto.“Tenía la oportunidad de debutar y mostrarme porque se había lesionado el 9. Primero me dijeron que había llegado el transfer, pero en el vestuario me afirmaban que no”, asegura.

Sin dudas, la primera prueba de supervivencia que le ponía el fútbol. Mientras tanto, Julián se sorprendía con la vida de los daneses y aprendía de su nueva cultura.”Pese al frío, que es lo que más me costaba, fue magnifico”, recuerda. Entre otras cosas, no podía creerver a sus compañeros “con el pelo congelado”. Incluso, una vez ¡se le congelaronolas pestañas!Increíble.

Además de esto, Gilcomenta en esta charla exclusiva con Bolavip Argentina que la gente “tira las cosas que ya no usa”. Mediante una cintita, la población danesa indica que ese objeto está siendo regalado. Un lindo gesto que llevó a Julián a tener algo similar a una bicicletería: “Tenía doce bicis, ja. Me gustaban y con los chicos las rearmabamos y cambiabamos”, cuenta tentado.

La aventura transcurría y Gil recalaría en elVatanspor, un lugar que lo acercaba a sus raíces: “Estuve muy cómodo porque lo manejaban unos turcos que son muy parecidos a los argentinos”, cuenta sobre una institución en la Julián ya forma parte de su historia, ya que fue goleador del torneo y lo pusieron en el museo del club.

“Acordate que cuando vengan argentinos van a ver tu trofeo de goleador en nuestro salón de la fama”, le comentaba el manager de dicho club a Julián. Una etapa increíble quelo acercaría a su país de residencia actual: los Emiratos Árabes Unidos.

Conocer a un tal Diego Armando Maradona

Gracias a que su hermana trabaja desde hace unos años en los Emiratos, Julián ya conocía el país que hoy en día lo recibe y allí pudo vivir un hecho increíble. “Ella, sabiendo que soy un enfermo del Diego, me hizo una sorpresa. Me dijo que una persona quería llevarme a jugar allá y me llevó una noche una canchita. Había unos tipos jugando y de golpe veo a uno que le da de zurda. Es el Diego, dije. No tenía dudas”, comienza relatando.

“Estuvimos un rato charlando, mientras la gente se agolpaba para verlo. Es increíble lo que genera”, recuerda sobre un lindo momento en el cual Maradona jugaba mientras él lo filmaba. Incluso, el delantero comenta que apenas llegó al auto “tenía un mensaje de Diego pidiéndome los videos para mandárselos a su nieto”.

Instagram: @Julianleandrog

Instagram: @Julianleandrog

Un momento único que no solo quedaría en eso ya que para la envidia de todos los lectores de esta nota, el Diego se volvió a comunicar: “A las dos semanas me llamó para ir a jugar un picadito y yo estaba en Dinamarca. Me puse a buscar vuelos como loco pero no pude conseguir”, tira dejando escapar una sonrisa que demuestra lo que es Maradona para Julián Gil.

Volviendo al fútbol, la estadía de Gil en el Vatanspor fue muy positiva. Pero necesitaba cambiar el contexto de su vida por algo más familiar. Por esto, el delantero decidió mudarse a Malta.“Futbolísticamente fue bajar dos escalones pero se ganaba mucho en el confort de la vida. Se vive una vida de playa, totalmente relajado”, comenta.

Durante su estadía en el archipiélago del Mediterráneo, Julián pasó por dos equipos: Marsaxlokk y Qala Saints FC. Conjuntos en los cuales sacaba diferencias físicas porque “los locales no ganan tanta plata, entonces viven de otras cosas”. Un hecho que lo llevaba a sentirse alejado de un fútbol profesionalpese a que para el hincha el equipo es lo más importante: “Son muy pasionales. En la vida cotidiana se nota mucho si ganás o perdés”.

Ya sin importar la buena y relajada vida fuera del fútbol que podría tener, Julián decidió irse a España para recuperar lo profesional del fútbol sin saber quése iba a encontrar: “Futbolísticamente levantémucho pero económicamente fue muy malo porque pasé seis meses sin cobrar”, relata para Bolavip Argentina sobre su paso por el CD Torrevieja.

Cortesia Julián L. Gil

Cortesia Julián L. Gil

Esta situación de no poder cobrar su salario, sumado a que la nueva gerencia del Torrevieja tampoco pagó sus deudas, llevaron al delantero a los Emiratos Árabes Unidos. Un país “muy lujoso, con mucha ostentación, pero sobre todo muy ordenado y seguro”, un lugar en donde cruzar una Ferrari en la calle es moneda corriente.

Sintiéndose como uno más ya que “es un lugar muy cosmopolita, con el 80% de la población de origen extranjero”, Gil firmó con el HPC La Liga, una academia de fútbol del ente que regulala Primera División del fútbol de España, y disfruta su nueva vida con una ventaja sobre sus compañeros gracias, nuevamente, a su ídolo: “Nos tratan muy bien gracias a Maradona. Dejó la bandera Argentina en lo más alto”.

Como goleador, capitán y referente del equipo, Julián reparte sus días como jugador y además entrenando a varios juveniles de la Academia mientras disfruta la cordialidad de los árabes: “Me respetan mucho pero siempre me quieren regalar algo, son muy generosos. Si no le parás el carro te regalan todo lo que tienen”, relata mientras se ríe sobre esta situación.

Sin embargo, existen choques culturales que a veces complican las cosas.“Me vuelven locos los indios que no sépor quétienen la costumbre de colarse en los supermercados”, comenta dando un ejemplo chico pero bastante claro sobre una realidad en la cual muchas veces “te encontrás gente rezando en la calle”. Incluso algunos de sus compañeros abandonan la práctica para llevar a cabo sus costumbres.

Amante del mate, con su buena provisión de yerba, Julián Gil es hoy una de las grandes figuras que tiene la Segunda División de los Emiratos Árabes Unidos.

Finalmente,el delantero no le escapa a la chance de viajar a ver el Mundial de Qatar.“Como sea, con o sin entrada, voy a ir. Estoy esperando que habiliten un corredor en Arabia Saudita para ir en auto, serán unas cuatro horas aproximadamente”, suelta para envidia de todos.

Mira la charla completa de Julián Gil con Bolavip Argentina