Los primeros 15 minutos, Chile se sintió bien en la cancha, sin pasar grandes apremios, luego de eso, Uruguay fue marcando la pauta del compromiso.
Velocidad, transición y presión fueron los grandes aspectos del equipo de Marcelo Bielsa que desnudó la retaguardia chilena que constantemente era sobrepasada.
La propuesta de Berizzo poniendo a doble marca por las orillas no dio resultado. Aravena perdido por derecha y Brereton por la izquierda no le acomoda el trabajo por la banda. Pulgar irreconocible y Charles Aránguiz intentó, pero aguantó un tiempo.
A los 31 minutos cayó el primer gol, una buena jugada charrúa que fue finalizada por Nicolás de la Cruz. El tanto pegó fuerte y la Roja no pudo aguantar el chaparrón que fue sellado por Federico Valverde en el minuto 45.
En la segunda parte Uruguay estiró las cifras convirtiendo el partido en goleada. A los 76′ otra vez de la Cruz vence a Brayan Cortés.
Con el ingreso de Vidal pero con el tres a cero consumado, algo mejoró La Roja, pero se caracterizó por un equipo muy desordenado y sobrepasado por la juventud y vértigo de la escuadra de Bielsa.
El King convirtió el descuento cuando el reloj marcaba 79. Chile intentó ir por el segundo descuento, pero siempre estuvo atenta la última línea uruguaya.
Nota aparte para Messhatou, un muchacho que estuvo muy incómodo, en el primer tiempo el gol pasa por su orilla y le quedó grande su primer partido por clasificatorias. Inentendible la propuesta de Berizzo.
