Universidad de Chile comienza a despejar las grises nubes que entristecieron su semana. Tras la catástrofe vivida ante Independiente de Avellaneda por Copa Sudamericana, el conjunto azul trabaja para dar vuelta la página.
Para ello, debe dejar en orden todos los asuntos legales referidos a los hechos de violencia vividos en Buenos Aires. Es que el cuadro laico no solo enfrentó una cobarde agresión hacia sus hinchas, sino que también recibió acusaciones.
Una de ellas, muy sensible: tras la cordillera denunciaron que, presuntamente, los fanáticos azules abusaron de funcionarios del elenco rival. Incluso, la prensa trasandina aseguró que fueron obligados a tomar orina.
Ante tal situación, José Ramón Correa se manifestó. El abogado de Azul Azul descartó tajantemente esas acusaciones y le envió un feroz mensaje a los encargados de esparcir tales rumores.
En conversación con La Magia Azul, señaló: “Si lo que ellos dijeran, si sus pensamientos fueran verdad, me costaría creer que hoy día el Tribunal de Justicia hubiera podido dejar libres a 104 personas por una solicitud del Fiscal”.
Universidad de Chile deberá defenderse
Cabe destacar que tras el lamentable episodio vivido en territorio argentino, Conmebol abrió una investigación contra ambos clubes. Por eso, las dirigencias tendrán que recopilar todos los antecedentes posibles.
Se determinó que tendrán plazo hasta el 27 de agosto para entregar sus alegatos contra la entidad mencionada. Tras ello, se comenzarán a analizar los argumentos y, finalmente, definir las respectivas sanciones.
