Hace una década, Universidad de Chile apostó por una figura de Primera B. A pesar de la diferencia de categoría, el cuadro azul se la jugó y terminó fichando a la que en ese momento era la figura de Unión San Felipe.

Sin embargo, no tuvo un grato paso. De hecho, no jugó ningún compromiso en aquella gloriosa temporada de 2014. ¿De quién hablamos? Sebastián Zúñiga. El atacante recordó su fugaz estadía en los azules.

Y es que a 10 años de dicha experiencia, decidió colgar los botines. En conversación con AS, confesó que le quedó una espinita en el cuadro que era dirigido por Martín Lasarte.

“Creo que es una deuda que tengo. Venía de San Felipe, porque lo había hecho bien. Creo que fue por inmadurez. Fui un cabro chico que llegó a un club grande y uno se puede sentir mejor que muchos”, comenzó señalando.

En dicha línea, el retirado atacante explicó: “No es así, después me fui dando cuenta de eso. Tenía capacidad física y técnica para estar ahí, pero la parte mental es muy importante también”.

“Un camarín de un equipo grande es muy distinto al de cualquier otro equipo. En ese tiempo, yo sólo era de entrenar y después irme para la casa a descansar. Fue un poco de inmadurez y de vivir un poco más para el fútbol”, lanzó.

A la izquierda, Sebastián Zúñiga en su presentación oficial en Universidad de Chile.

Su salida de los azules

Tras ello, explicó por qué decidió dejar Universidad de Chile tras coronarse campeón del Torneo de Apertura 2014. ¿Dónde recaló? En Cobresal: logró un título histórico en el cuadro de El Salvador.

“Yo tenía contrato por un año en la U y Lasarte me dijo que me quedara, que iba a tener opciones, a lo mejor en la Copa Chile”, reveló.

“Preferí irme a un club donde iba a tener mayores posibilidades y surgió lo de Cobresal. En esos años, el llegar allá era para luchar por mantener la división y terminamos saliendo campeones”, cerró.