Millonarios y Junior son dos equipos grandes del Fútbol Colombiano, a lo largo de la historia se han acostumbrado a estar en finales, los enfrentamientos entre sí han marcado el balompié nacional. La rivalidad entre estos dos equipos ha sido significativa, rolos vs. costeños, azules vs. rojiblancos, ‘embajadores’ vs. ‘tiburones’.
Hace más de 40 años se vivió uno de los partidos más curiosos y, a su vez, bochornosos de la Liga Colombiana entre estos dos equipos. Ambos se sintieron ganadores y terminaron dando la vuelta olímpica, Dimayor tuvo que hacer días después un sorteo por televisión para definir al ganador de la llave.
En 1976 los títulos se daban anualmente, pero también se dividían en dos: apertura y clausura. Si bien, el ganador de cada torneo no se le sumaba una estrella, los equipos acostumbraban a dar la vuelta olímpica. Quien se quedaba con el primer lugar, recibía el beneficio de estar en el hexagonal final del año.
Tanto Millonarios como Junior, terminaron el Apertura de 1976 con 37 puntos luego de disputar 26 partidos, la diferencia de gol favorecía al equipo de la capital colombiana al tener nueve tantos más que el conjunto ‘tiburón’. Según el formato de esa época, la diferencia de gol no importaba, quienes igualaban en puntos debían definir todo en una serie de ida y vuelta.
El primer compromiso se disputó el 18 de junio en el estadio Romelio Martínez, el equipo local ganó 4-1 rompiendo así el invicto de 19 fechas del rival. Para los ‘rojiblancos’ marcaron Martínez, Maldonado, Gómez y el papá de la ‘Bruijta’ Verón, mientras que por los azules descontó el máximo goleador de ese año, Miguel Ángel Converti. Además de los goles, el juego fue bastante cortado y se vio envuelto en varias agresiones por parte y parte.
El juego de vuelta fue todo un caos. Dos días después se enfrentaron en el estadio El Campín. Junior iba a defender su ventaja, mientras que Millonarios buscaba ganar el partido. Vale la pena recordar que los goles no eran tenidos en cuenta, para tener a un ganador, un equipo debía por lo menos sacar una victoria y un empate. Al parecer los de Barranquilla no lo sabían y al término del partido se generó un caos.
“Si persiste el empate en el segundo partido, se jugarán 30 minutos más, y si persiste el empate se definirá la clasificación por mayor diferencia de goles, mayor número de goles a favor, mayor número de goles a favor como visitante, menor número de goles en contra o por sorteo”.
Los ‘embajadores’ ganaron 3-1 en los 90, en el tiempo extra, Javier Tamayo anotó el 4-1. En ese momento empezaron los problemas, el árbitro tuvo que detener el partido mientras los directivos de cada equipo revisaban el reglamento. Varios expulsados y una gresca en el terreno de juego se robaron el show. Después de casi media hora, el juez, Omar Delgado, decidió suspender el partido ante las confusiones del reglamento. Los dos equipos empezaron a dar la vuelta olímpica escoltados por la policía.
La Dimayor, después de más de una semana de haber terminado el encuentro en Bogotá, decidió realizar un sorteo por televisión, el cual fue llevado a cabo el 29 de julio en el Noticiero Suramericana. Varios delegados y el presidente de la época, León Londoño, estuvieron encargados del sorteo que dejó como ganador a Junior.
Al final de la temporada, Nacional fue el campeón, Cali el subcampeón, Millonarios tercero y Junior cuarto.
Columna de Hernán Peláez sobre el bochornoso suceso