Luego de muchas semanas de ausencia y sin futbol de por medio, la Premier League, así como otras ligas del Viejo Continente, reanudó sus actividades en pos de completar sus correspondientes competencias. Pese a que desde un principio se esperaba que los jugadores presenten ciertas incomodidades físicas a la hora de retomar el ritmo, Sergio Agüero angustió a todos al confirmar que sufrió una rotura de meniscos en el cruce vs. Burnley.

 

Siendo una de las principales figuras del Manchester City, el Kun, habiéndose constatado el grado de su lesión, comenzó inmediatamente un viaje relámpago para tratar lo misma de la forma más efectiva posible. En diálogo con sus seguidores a través de su cuenta de Twitch, el argentino, relatando lo vivido. "Estoy contento porque podría haber sido más grave. Ahora queda la rehabilitación, empezar a hacer fuerza y caminar", afirmó.

Llevando a cabo un breve análisis general de todo lo sucedido en los últimos días, Sergio indicó: "Me tengo que quedar unos días más acá. Fue todo muy rápido. Me lesioné el lunes, el martes viajé, el miércoles a la mañana me vio el médico, me sacaron sangre y a la hora estaba en el quirófano".

 

Saltando a detallar cómo fue la operación en su rodilla, Agüero, con la alegría y humor que lo caracterizan, lanzó: "Vino un chabón a buscarme con la camilla. Me agarró desprevenido. No estaba preparado. Me dijeron que me iban a dar un relajante, pero era anestesia. Los ojos se me fueron para todos lados".

Continuando con su relato en torno a la intervención quirúrgica, el artillero del Manchester City sumó: "Alta droga me dieron. Vino una enfermera para hacerme unas preguntas y no tenía forma de responderle. Vi toda la operación, pero no me acuerdo de nada".