Recibiendo una propuesta más que interesante luego de confirmarse la salida de Quique Setién del Barcelona, Ronald Koeman tardó poco en convertirse en el nuevo y flamante DT de la institución Blaugrana. El neerlandés, ya instalado como entrenador de la institución, comenzó a diagramar sus primeros cambios en vistas al inicio de la campaña 2020/2021.
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Sin ningún tipo de temor y manteniéndose firme junto a la apuesta que la directiva Culé hizo por sus servicios, el director técnico le comunicó a varios pesos pesados como Ivan Rakitić, Luis Suárez y Arturo Vidal que no serían tenidos en cuenta para la reestructuración que el conjunto de la Liga Española prometió.
Con Lionel Messi subido ya al barco y comprometido a hacer todo lo posible para aportar su grano de arena en la temporada que se avecina, Koeman pasó a centralizarse en los aspectos tácticos y estratégicos para lentamente buscar sacar a flote al Barcelona, equipo que al día de la fecha se encuentra diezmado y trabajando para volver a ser un equipo 100% competitivo.
Habiendo comandado ya sus primeras sesiones como nuevo entrenador de la institución, distintos portales europeos coincidieron al marcar que el estratega habría definido la formación 4-2-3-1 como la ideal para estructurar sus onces iniciales.
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Trasladándose a los nombres y apellidos en cuestión, los sitios web del Viejo Continente especializados en deporte explicaron que el XI de ensueño de Koeman se esctructuraría con Marc-André ter Stegen; Nélson Semedo, Gerard Piqué, Clément Lenglet, Jordi Alba; Frenkie de Jong, Miralem Pjanić; Lionel Messi, Antoine Griezmann, Ousmane Dembélé; Ansu Fati.
