Sony vuelve a ser el centro de atención de la industria de los videojuegos, aunque ésta vez no por los mejores motivos. Lejos de hablar de la presentación de juegos de la PlayStation 5 que reprogramaron para adherirse a las manifestaciones contra el racismo, hoy nos toca reportar el incidente con la Corte Federal de Australia, que le cuesta algunos millones de dólares.

Como reporta The Sunday Morning Herald de Australia, Sony fue multada por 3,5 millones de dólares australianos (2,4 millones de dólares estadounidenses) luego de romper las leyes del consumidor en Australia, y su política de reembolsos.

Los cargos fueron impuestos contra Sony Europe, la cual provee los términos del servicio que los consumidores en Australia deben aceptar al crear y utilizar una cuenta de PlayStation. Y, en definitiva, fueron basados en los reembolsos por juegos defectuosos que reciben los jugadores que compran juegos digitales, los cuales no reciben nuevamente su dinero, sino que Sony les devuelve lo gastado en créditos de PlayStation Network.

La parte demandante indicó que "los consumidores que compran productos digitales en línea tienen exactamente los mismos derechos que tendrían al comprar en una tienda física", algo que claramente no estaba sucediendo.

"La indevida conducta de Sony Europe puede haber causado que los consumidores australianos no busquen un reembolso, reemplazo o reparación de un juego defectuoso aunque la Ley Australiana del Consumidor les diera el derecho a hacerlo", explicó el letrado Rod Sims, quien explicó que aunque la compañía tenga su base en el Reino Unido, si vende a consumidores en Australia, debe aplicar las Leyes del Consumidor del su país.

En definitiva, la corte decretó que Sony rompió las mencionadas Leyes, a lo cual fue multada con la mencionada cifra, e imaginamos modificarán algunas de su líneas en los Términos y Condiciones para evitar tener problemas de éste estilo en el futuro.