América y Chelsea se enfrentaron en un partido amistoso que terminó siendo mucho más parejo de lo que parecía en el papel, otorgandole a los fanáticos un espectáculo agradable y acciones de peligro en ambas porterías.
Los Blues se fueron al frente en el marcador gracias a un tanto de Timo Werner, con las Águilas igualando el luminoso solo cinco minutos después gracias a un terrible error de Reece James que se reflejó en el marcador.
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Al minuto 60 el lateral inglés tomó la pelota y decidió tocarla atrás. Para su mala fortuna, el portero Marcus Bettinelli se había movido del arco, quedándose sin posibilidad de sacar un esférico que no llevaba nada.
Gracias a esta terrible desconcentración, el cuadro dirigido por Fernando Ortíz terminó igualando los cartones, mostrando que tiene el nivel para plantarle cara a este tipo de adversarios.
