No fue un gran combate de boxeo. Eso está claro. Pero sí un nuevo negocio multimillonario que, dicen, favorece a toda la industria. Después de muchas idas y venidas, Jake Paul y Tommy Fury se enfrentaron el pasado domingo en Arabia Saudita. Parece ser que muy pronto volverán a hacerlo.
Para Jake Paul fue la primera pelea ante un boxeador profesional y la primera derrota en su incipiente carrera. Ajustada, en fallo dividido. Para Tommy Fury, que se mantiene invicto, el combate más trascendente, pues popularizó su nombre en todo el planeta y le reportó más dinero que sus anteriores ocho combates juntos.
Lo primero que hizo el youtuber fue pedir revancha, herido en su orgullo de boxeador. Lo primero que hizo el hermano del campeón mundial de peso pesado del CMB, Tyson Fury, fue mostrar que estaba dispuesto, pues nadie dejaría pasar una nueva oportunidad de forrarse los bolsillos de billetes.
Según informó el periodista especializado Mike Coppinger, de ESPN, el nuevo cara a cara ya es un hecho e incluso llegará mucho antes de lo esperado, pues las compañías promotoras y las cadenas de transmisión están buscando cerrarlo para julio de este año. ¡Negocio redondo!