La Selección de México no pudo ante los Estados Unidos en el encuentro correspondiente a la final de la Liga de las Naciones Concacaf. Los comandados por Gerardo Martino cayeron por 3-2 y obtuvieron la medalla de plata.
El magnífico escenario de Denver se vio "manchado" por tres aficionados del país Azteca, quienes arrojaron proyectiles hacia los futbolistas luego de que Christian Pulisic marcara el tercer tanto y el de la victoria.
Luego del partido, algunos fanáticos del país Azteca se metieron al campo de juego; mientras que los proyectiles seguían invadiendo el estadio. Además, Andrés Guardado se mostró a los empujones.
Por otro lado, cabe destacar que se volvieron a escuchar gritos homofóbicos por parte de los aficionados mexicanos, algo que ya no debería seguir ocurriendo dentro del ambiente futbolìstico.
Es por esto que el juego estuvo demorado algunos minutos, pero luego se reanudó y llegó a finalizarse. México deberá prepararse y entrenarse para lo que será la Copa Oro, donde buscarán dar un mejor papel.
