Los receptores abiertos suelen llevarse todos los flashes en la NFL y Calvin Johnson se destacó entre ellos hasta su retiro en 2015.

Sin embargo, parece que la estrella de los Detroit Lions no la pasó demasiado bien durante su paso por la liga y fue muy crítico con la franquicia.

En una entrevista con Sports Illustrated, Megatron reveló varias actitudes – como mínimo – cuestionables, entre las que surge, por ejemplo, hacerle devolver alrededor de US$1.6 millones de su contrato pago hasta 2016. “No me afectó, pero no les haces eso a tus mejores jugadores”, dijo.

De todos modos, el jugador con más yardas por recepción en una sola temporada en la historia de la NFL dio algunos detalles más escabrosos de su relación con los Lions.

El más oscuro fue que lo hicieron mentir sobre haber tenido una conmoción cerebral: en 2012 dijo a los reporteros que había tenido una, pero lo hicieron decir que fue una confusión de términos médicos.

“Sabía que era una conmoción cerebral porque había perdido el conocimiento. No veía bien, pero querían que cambiara mis declaraciones”, denunció.

Además, reveló que el año del récord de yardas (2012, con 1.964), se había lesionado ambas rodillas, un tobillo, un pie y hasta tenía un dedo roto en un ángulo de 90 grados ¿El diagnóstico del staff del entonces entrenador en jefe Jim Schwartz? Que se lo arregle tras el retiro.

También, aseguró que los jugadores utilizan todo tipo de analgésicos opioides, pero que el prefería el cannabis… y que fumaba después de cada juego.

Johnson es uno de los receptores más prolíficos en la historia de la NFL y tiene una gran cantidad de récords por recepciones en su carrera. Entre ellos, la mayor cantidad de yardas recibiendo y el de más juegos consecutivos con 100 yardas o más (comparte con Adam Thielen, con ocho).

En sus ocho años en la liga jugó 135 partidos y tuvo 731 recepciones para 11.619 yardas y 83 anotaciones, siempre con Detroit.