Se cortó la atención al cliente. Por dos horas, no se respondieron más llamadas. El cartel de abierto pasó a cerrado y las televisiones de todos los locales se prendieron. Las semifinales de la Copa de la Liga comenzaron en plena jornada laboral. A las 15 del lunes, Boca y Racing hicieron girar el balón en San Juan buscando un lugar en el último partido que se jugará en la misma provincia, el viernes de esta semana.
Ya clasificados ambos a los octavos de final de la Copa Libertadores, el gran objetivo del semestre, se plantaron en el campo de juego buscando llegar a las vacaciones de la mejor manera. De igual manera, sin querer arriesgar de más, ofrecieron un partido que se destacó por la falta de acciones de ataque y el poco protagonismo de los arqueros en los 90 minutos.
Se pegó más de lo que se jugó, el árbitro no tuvo la firmeza como para expulsar a ningún futbolista y después del 0-0, llegaron los penales. Hasta ahora, todos los duelos de cuartos de final y el primero de esta nueva instancia se definieron desde los 12 pasos. Si hay algo que describe a la perfección el fútbol argentino, es ese dato.
Finalmente, el ganador fue el conjunto de Avellaneda: Carlos Tevez estalló su remate en el travesaño, a Pulpo González se lo atajaron, y en el quinto disparo Enzo Copetti, con mucha calma, hizo que la pelota toque la red para sellar el pase.
En pocas horas, Independiente y Colón de Santa Fe intentarán dar un mejor espectáculo en el mismo estadio Bicentenario buscando un boleto rumbo a la gran final, un día después de que la Selección Argentina vuelva a jugar, esta vez por las Eliminatorias rumbo al Mundial de Qatar 2022.