El mediodía del domingo trajo un verdadero partidazo en la previa al tratarse de un clásico como Tigre y Platense. Es que además de lo que significa un duelo entre ambos equipos de la Zona Norte del Gran Buenos Aires, el contexto de los dos favorecía al espectáculo.

Tigre, con un mal arranque de campeonato encontrándose en los puestos bajos de la tabla y con solo dos partidos ganados en nueve disputados, pero siendo el flamante subcampeón de la Copa de la Liga estando recién ascendido. Mientras que el Calamar llegaba al duelo clásico como invicto y peleando los puestos altos, pudiendo quedar incluso segundo si ganaba.

Pero, el resultado fue ampliamente beneficioso para el Matador, ya que no solo triunfó, sino que goleó y se floreó ante su gente en el estadio José Dellagiovanna, donde terminó quedándose con el partido ganando por 3 a 0, cortando así la racha del conjunto de Vicente López.

Ya desde el inicio Tigre lo ganaba, ya que a los 15 minutos mediante el defensor Víctor Cabrera arrancó arriba en el marcador. Seguido a eso, en menos de diez minutos llegó el segundo trompazo del Matador gracias a un remate desde afuera de Lucas Menossi que tuvo un fortuito desvío en la defensa calamar.

Pese a que en el complemento Platense salió a arremeter a Tigre y tratar de cambiar el resultado que comenzó negativo, Facundo Colidio le dio una baldazo de agua fría a los de De Felippe sentenciando el 3 a 0 para los locales. Sebastián Prédiger fue la figura absoluta del partido, cortando los ataques del Marrón en mitad de cancha e iniciando el juego ofensivo que terminó siendo preciso en los de Diego Martínez. Partidazo en Victoria, y una nueva demostración, por ambos contextos, que los clásicos son partidos aparte.