En la temporada 2005/06, Miami Heat logró un hito importante en su historia, debido a que se consagró campeón de la NBA por primera vez tras vencer en la final a Dallas Mavericks por 4 a 2. Una de sus figuras fue Antonie Walker, quien llegó para el inicio de esa temporada y tiene una historia de vida particular. 

Es que, luego de formar uno de los dúos más importantes de la NBA junto a Paul Pierce en Boston Celtics entre la década de 1990 y de los 2000, y de ganar el primer anillo de la historia de los Heats, Walker, quien logró más de 100 millones de dólares en su carrera, terminó en bancarrota. 

Tras su retiro, el basquetbolista perdió toda la fortuna que cosechó en su carrera debido a malas decisiones que lo llevaron a la adicción al alcohol y las apuestas deportivas. Además, años atrás, en 2009, el oriundo de Chicago fue arrestado por conducir en estado de ebriedad.

Por otro lado, también tuvo problemas con la justicia debido a que tres meses después del mencionado arresto, fue acusado de tres delitos por fraudes financieros y se declaró culpable de uno, por lo que se le puso en libertad condicional y trabajó para saldar la deuda. Como consecuencia de esto, tuvo que vender sus anillos de campeón para poder hacerle frente a sus deudas.

Luego de este mal momento y de perder toda su fortuna, Walker regresó a jugar de manera profesional al básquet en 2010 en la Liga de Puerto Rico, con el objetivo de volver a cosechar dinero para reponerse de su mala situación económica. 

La actualidad de Antonie Walker

Después de salir de esta compleja situación financiera, en 2013 Walker informó que pudo pagar todas las deudas que tenía, y a día de hoy sigue ligado al básquet desde otro lugar. Actualmente es analista deportivo para diferentes señales de televisión y además da charlas motivacionales a jóvenes en la Fundación Boston Celtics, que tiene como objetivo concientizar respecto al uso indebido del dinero.