A lo largo de 25 temporadas, Roger Federer se mantuvo en la cima del tenis y, año a año, escribió su nombre en la historia grande del deporte. El suizo ganó 103 títulos ATP a nivel individual, incluyendo 20 conquistas en Grand Slams, con éxito en todos ellos.
Los logros de su carrera y el respeto que ganó por parte de sus contrincantes lo convirtieron en una de las voces más autorizadas de esta disciplina. Su opinión acerca de este deporte tiene gran relevancia cada vez que ofrece su punto de vista.
En Nueva York, en una clínica junto a futuras estrellas del tenis, una de las chicas que tuvieron el privilegio de entrenador junto a él le consultó quién había sido el rival más duro de su carrera y Federer no dudó al responder que fue Rafael Nadal.
“Luché más contra Rafa. Sí, solo por su top spin y su zurda, ya sabes. ¿Te gusta jugar contra zurdos?”, interactuó el suizo y encontró la negativa de la chica. “Ahí tienes”, sintetizó la leyenda.
El de Manacor y Federer protagonizaron la rivalidad más salvaje de la historia de esta disciplina y cada duelo entre ambos sumó un capítulo a su historia. Incluso, Nadal finalizó sus episodios con un saldo a favor de 24 triunfos en las 40 ocasiones en las que se enfrentaron.
En los últimos años de carrera del suizo, ya lejos de las instancias decisivas de los principales escenarios, Nadal aprovechó para superarlo en cuanto a Grand Slams conquistados, con 22. Sin embargo, se quedó en 92 títulos individuales de ATP, por debajo del palmarés de su rival.
¿Federer quiere volver al tenis?
En diálogo con L´Equipe, Su Majestad afirmó: “He estado muy ocupado con mis viajes y el trabajo de mi fundación con mi familia. Fuimos a Sudáfrica a visitar proyectos escolares para ayudar a los niños a obtener una mejor educación. Me gustaría volver a jugar un poco al tenis. Ya no juego al golf por ahora, ¡he jugado mucho!”.
Además, agregó: “Me gustaría volver a entrenar un poco, dos o tres veces por semana. Y espero volver a hacer exhibiciones, llenar estadios en todo el mundo. Aún no hay nada planeado, pero lo extraño. Apenas he jugado desde que me retiré, mi cuerpo y mi mente necesitaban un descanso. He jugado un poco con mis hijos, pero me gustaría volver a hacerlo en serio. Durante mis viajes volveré a ello. ¡Y quizás me vuelvas a ver en la cancha pronto!”.
