Otra vez la violencia y los incidentes motivaron la suspensión de un encuentro y escribieron otra olvidable página para el fútbol argentino. El duelo entre Gimnasia y Boca fue suspendido a los 9 minutos cuando el gas lacrimógeno que venía de afuera invadió por completo el campo de juego.

Así, y luego de varios minutos de imágenes lamentables de hinchas haciendo un esfuerzo inconmensurable por respirar, gente desesperada buscando otros familiares perdidos y cientos de fanáticos ingresando al campo de juego para refugiarse de los incidentes de afuera.

Lo cierto es que el árbitro Hernán Mastrangelo confirmó la suspensión por "falta de garantías" varios minutos después, aunque los incidentes continuaron en las afueras y tuvo que pasar más de una hora para que la gente recién comience a poder irse del estadio.

 

EL COMUNICADO DE BOCA

Luego de hacerse eco de la suspensión, desde la cuenta oficial de Twitter de Boca intentaron llevar tranquilidad con un comunicado para aclarar el estado de su delegación en La Plata.

"Desde el Club Atlético Boca Juniors informamos que tanto los jugadores como la delegación que asistió al partido frente a Gimnasia se encuentran bien", escribieron.

Pasadas las 11 de la noche, aún no se sabía cuándo podría reanudarse el duelo por la 23º jornada de la Liga Profesional.