Estaba claro que la última derrota ante Estudiantes no iba a ser una más. La pálida imagen que mostró Boca en La Plata colmó la paciencia de varios y eso incluye la del Consejo de Fútbol. Miguel Ángel Russo deja de ser el técnico del Xeneize arrastrando un largo andar sin victorias.

Cuando el DT mire para atrás, verá que se irá con 2 eliminaciones a River y 2 títulos obtenidos en sus 20 meses en el cargo, que claramente no es poca cosa. Sin embargo, hay varios factores que hicieron que su despedida del club de la Ribera sea pedida a gritos por todos los hinchas. Los repasamos:

1. Las urgencias deportivas

Cada derrota de Boca en el campeonato local es un paso atrás para clasificarse a la Copa Libertadores del año que viene. El Xeneize empezó el torneo accediendo al torneo más deseado, pero poco a poco se fue alejando. Hoy, está a 8 unidades del último clasificado y todo indica que se jugará el semestre en la Copa Argentina.

2. El juego del equipo

Las presentaciones del Xeneize se hicieron aburridas para el neutral y desesperantes para los hinchas. Si tenemos en cuenta aquel Boca del 2020, el equipo pasó de anotar 2 o 3 goles por partido a ni siquiera patear al arco. Aún con varios mercados de pases encima, el DT nunca logró imprimirle su sello al funcionamiento.

3. La larga racha sin triunfos

Si bien hay dos partidos con la reserva de por medio, una injusta eliminación de la Copa Libertadores y algún empate que se festejó como un triunfo, Boca está atravesando su peor racha histórica sin triunfos. Con 8 empates y 2 derrotas, el Xeneize igualó una marca que no tenía desde 1957.

4. La falta de reacción en momentos adversos

Si hay algo que preocupó más que algún partido perdido fueron las pocas medidas tomadas para dar vuelta la situación. Desde aquella derrota con Santos -donde Boca perdía 3 a 0 y Miguel no se despegaba de su asuento- hasta hoy, hubo varios casos donde se notó la demora en los cambios para cambiar la imagen del equipo. Sin ir más lejos, ante Estudiantes, la primera variante llegó a los 79', tres minutos después del gol rival.

5. La poca autocrítica

Russo reconoció el mal presente futbolístico de Boca aún eliminando a River, pero jamás se vieron acciones para intentar revertir esa situación. "Tenemos que seguir trabajando mucho. En el primer tiempo tuvimos posibilidades, después el rival esperó, esperó, esperó... Y bueno, en la segunda parte se nos complicó", fueron las últimas declaraciones de Miguel como DT de Boca tras un partido donde al equipo le costó pasar 3/4 de cancha.