En la previa a la trascendental final de la Copa Argentina contra Talleres, Boca dejó una pálida imagen en Sarandí tras empatar contra Arsenal sin goles. El Xeneize no pudo superar al último equipo de la tabla de posiciones de la Liga Profesional y se encendieron las alarmas de cara al cruce definitorio de este miércoles que entregará, ni más ni menos, que un nuevo título en el fútbol argentino. El equipo de Sebastián Battaglia se jugará el semestre completo en 90 minutos y los hinchas lo viven de esa manera.

En el inicio de una nueva semana, en ESPN F90 se analizó todo lo que dejó la anteúltima fecha del campeonato y el tema principal fue la igualdad del club de La Ribera previo a enfrentar a Talleres por la final de la Copa Argentina. Lejos de calmar las aguas, Oscar Ruggeri tomó la palabra y se desahogó hablando acerca del vestuario de Boca y la actitud de sus futbolistas. “Yo me crié con tipos que que me educaron y me enseñaron. Yo ya entendía que tenía que estar concentrado ahí. Esos tipos no dejaban entrar a nadie al vestuario. Estaba prohibido para dirigentes, ídolos de Boca… ¿vos crees que alguien le iba a decir algo a Pernía, al Chino (Jorge Benítez), Ribolzi? Ellos me enseñaron que el vestuario era sagrado”, relató el “Cabezón” sobre su experiencia en Boca.

En medio de los elogios a Leonardo Ponzio y su rol como líder en el Millonario, Ruggeri trazó la comparación con el actual plantel del Xeneize y dejó una frase contundente. “Gallardo no iba al vestuario, lo manejaron los 3 o 4 referentes que nosotros sabemos. El vestuario es recontra mil importante, porque las cosas que pasan en Boca no dejaríandirigir ni a Guardiola. Si un tipo viene borracho, otro agarra los botines y va a la m… porque quiere ver a la mamá, el otro dice ‘no quiero jugar más en Boca’… ni Guardiola dirige a estos pibes. Si el vestuario no es sano, no hay chance”, sentenció el panelista de ESPN F90 ante la atenta mirada del Pollo Vignolo y el resto del equipo.

A continuación, el campeón con la Selección Argentina en México 86′ recordó lo sucedido con la charla de Riquelme con los jugadores dentro del vestuario de Boca y contó los detalles de una encuesta que realizó por sus propios medios. “Fue muy grave. Si soy capitán del equipo y me hacen bajar del micro… mirá que yo llamé a jugadores de Europa y de acá, eh. Quería saber qué me respondía cada jugador sobre esta situación. No hubo uno que me diga ‘no pasa nada, está bien’. Llamé a 20 tipos y todos fueron contundentes. Hay que estar preparado para estas cosas”, concluyó Ruggeri con respecto al puesto de Román en el Xeneize. Muy fuerte, como de costumbre.