Los últimos días fueron bastante caóticos para los hinchas de Boca, que debieron sufrir la gran cantidad de noticias que surgieron a partir del posible arribo de Edinson Cavani, como así también la no renovación del contrato de Agustín Rossi. Y en medio de ello, se encontraba el partido frente a Platense, con quien volvieron a cruzarse en La Bombonera después de 24 años.

Después de lo que fue la durísima goleada que sufrió en Paraná frente a Patronato, los comandados por Hugo Ibarra se presentaron en su estadio, y ante su público, para buscar un triunfo que les devolviera la sonrisa y también los acercara a los primeros puestos de la Liga Profesional, ya que Atlético Tucumán y Argentinos Juniors fueron derrotados en la jornada del sábado.

Si bien el conjunto visitante planteó un juego defensivo y buscó salir de contra tratando de aprovechar la velocidad de Mauro Zárate y Vicente Taborda, la jerarquía de Boca, impuesta a través de Alan Varela y Óscar Romero, quienes fueron los motorcitos del mediocampo. Y así lo dejó bien en claro el 10 paraguayo, que abrió el marcador con un soberbio tiro libre desde el sector derecho del ataque azul y oro.

A Platense le costó generar situaciones de peligro, y quedó más que claro con las estadísticas: a lo largo de los primeros 45 minutos, los dirigidos por Omar De Felippe no tuvieron disparos al arco, por lo que Rossi no sufrió complicaciones. Y si bien el Xeneize no fue extremadamente superior, aprovechó sus chances.

Cuando el reloj alcanzaba los 42 minutos de la primera etapa, Sebastián Villa aprovechó el error defensivo del Calamar para generar la jugada individual y escapar de la marca, esperar a Romero y lanzarle el centro al ex Racing, quien definió de cabeza para ampliar el resultado. 

En el complemento, los de Ibarra salieron decididos a poder sentenciar el resultado y así no tener ningún tipo de sobresaltos ni complicaciones. Pero no lo consiguieron: a través de Nicolás Morgantini, que aprovechó un rebote tras el disparo de Zárate, los de Saavedra alcanzaron el descuento en tan solo 10 minutos de la segunda mitad, y se metió en partido. Y por una cuestión lógica, la incertidumbre se hizo presente en Brandsen 805.

Con el 2-1 en favor de Boca, y a pesar de la tímida insistencia de Platense, el resultado no se modificó, por lo que el elenco local terminó triunfando y así escalando a la 9na posición de la tabla, además de quedar a tan solo 7 unidades del líder Atlético Tucumán. Y ahora, encarará la semana previa al clásico frente a Racing (chocarán el domingo 14, a las 20:30 horas) con otro ímpetu. Por su parte, al Calamar le tocará recibir a Banfield, y también soñará con volver al triunfo para escaparse en la zona baja de los promedios.