“Cardona es un quilombero” y “Racing se compró un problema”, fueron las frases que más se pudieron observar en las redes sociales después de que la Academia adquiriera los servicios del colombiano que no había renovado su préstamo con Boca. Y parecía que, aquellos que habían cruzado al enganche, comenzaban a tener razón.
Después de la práctica del viernes, donde los de Avellaneda disputaron dos amistosos ante Tigre (derrota en ambos por 2-1), Edwin Cardona se subió a su avión privado y emprendió un viaje relámpago con su familia. Y las críticas aumentaron, ya que los hinchas sostenían que el futbolista iba a cometer los mismos actos de indisciplina que en el club de La Ribera.
Cansado de las opiniones ajenas, el ex Atlético Nacional apareció en sus redes sociales y publicó un mensaje en el que disparó contra todos aquellos que se obsesionaron con su falta de disciplina: “¿Y siguen hablando? Jaja. Quiero aclarar que todo el plantel tuvo libre, no solo Cardona. Averigüen antes de hablar mal de una persona. Y sí, me tomé el mismo descanso que todos, es para descansar con mi familia”, escribió en una historia de Instagram.
Sin embargo, no fue lo único que manifestó: “Y otra cosa. Quiero decirles a todos que ando bien, estaré a disposición para el comienzo del torneo”. Claro, Cardona sabía que al quedarse en el fútbol argentino iba a tener que seguir esquivando balas de todos los frentes posibles, y se mostró muy enojado, ya que también se había rumoreado que estaba fuera de estado.
Más allá de la artillería pesada con la que disparó el crack colombiano, en los últimos días había recibido la banca pública de Fernando Gago, su entrenador, quien en diálogo con ESPN sostuvo que“lo conozco desde que compartimos plantel en Boca. Sé lo que puede dar futbolisticamente”. Y añadió: “Es un jugador que marca la diferencia. Cuando lo llamé tenía muchas ganas de venir, con mucho entusiasmo. Me convenció cómo lo escuché y cómo fueron las charlas. Acá todos tienen que tirar para el mismo lado desde Edwin hasta los más jóvenes”.