Mark González fue uno de los buenos golpes de mercado que se concretaron en el fútbol chileno con su llegada a Colo Colo. Se esperaba una buena presencia del futbolista quien volvía al país luego de defender la camiseta del Sport Recife en Brasil y tener una tremenda trayectoria en el fútbol europeo incluso defendiendo la camiseta del Liverpool en Inglaterra.

Sin embargo, en ese entonces cuando se concreta su arribo al Cacique lo hizo en el proceso de Pablo Guede como entrenador, con quien se llenó de malas experiencias en su proceso carrera deportiva y que durante este miércoles descuero su relación con el entrenador que hoy milita en el fútbol español.

“No, el mío con Guede (Pablo). Sí, Pablo Guede. No entrenaba mal, pero tuve una experiencia muy mala, algo que hasta el día de hoy no me explico. No me hacía entrenar, de ahí viene también el que yo pasara lesionado porque los jueves hacían fútbol y a mí me hacía correr por al lado de la cancha, estaba la prensa”, daba a conocer en el programa de ESPN FShow.

Pero eso no era todo, debido a que adicionalmente, contempló que “La única opción que había es que estaba lesionado, no había otro motivo por el cual yo no estuviese entrenando. Eso es lo que yo no sé. Al parecer algo fue gatillando que yo después me fui enterando por otros compañeros”.

Mark González recibiendo las instrucciones de Pablo Guede en Colo Colo. (Foto: Agencia Uno)

Además, en esta misma línea, dio a conocer que “Me echaba la culpa de cosas. Por ejemplo, me acuerdo de un partido con Palestino que salió en la prensa que Colo Colo estaba espiando un entrenamiento y bueno, yo tengo buena relación con el Tito Bishara shara que en ese tiempo estaba ahí en Palestino, entonces como tenemos buena onda, cargó cómo que yo le estaba pasando información al Tito, ósea un rollo tremendo y eso me lo confirmó un compañero, que obviamente no voy a dar nombre”.

No obstante, el exfutbolista continuó contando su experiencia en ese momento. “Se pasó un rollo tremendo. Pero eso es una de las cosas porque después ya era una cosa que ni siquiera me saludaba. Era como una cosa que estuviéramos aquí, él viene, te saluda a ti, a ti, a ti, y a mi no me saluda y se va. Así de descardado”.

Es que el futbolista nunca se explicó esta mala relación. “Entonces yo la verdad es que no me explico el motivo de las cosas. Fue una muy mala experiencia, muy mala, la verdad es que no me la explico, pero bueno. Entrenaba bien, siendo objetivo en el fútbol en ese sentido”.

Lo cierto es que el futbolista tuvo la opción de conversar estas situaciones con el propio entrenador. “Lo hablamos un par de veces antes de que la cosa fuera porque después ya no nos podíamos ni mirar y resultado que nunca hubo un problema. ‘Yo le dije ¿Pasó algo, hubo un mal entendido, alguna cosa que pasó? Porque primero no estoy jugando, no me estás haciendo entrenar. No, no, todo bien’ me decía y esa semana jugué de titular”.

Finalmente, detalló que “Después al siguiente ya no y se volvía a pasar lo mismo, entonces fue súper raro. Nunca tuve un argumento para decirme realmente porque yo no jugaba. De hecho, hubo un par de entrevistas que recuerdo donde Schiappacasse le preguntaba y siempre se iba por las ramas y nunca fue al grano”.