La próxima edición de la Copa de Oro de la CONCACAF iba a tener como a uno de sus protagonistas a nada más ni nada menos que Nicaragua, selección dirigida por el chileno Marco Antonio Figueroa.
Pese a los buenos deseos e intenciones del DT, eso no podrá suceder ya que la CONCACAF decidió expulsar a los nicaragüenses del certamen por infracciones reiteradas al reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de jugadores de la FIFA.
En concreto, los centroamericanos alinearon hasta en 8 partidos a Richard Rodríguez Álvez, un jugador que, para los estándares del ente rector del fútbol mundial, no es elegible para jugar por Nicaragua.
El jugador, de origen uruguayo, no cumpliría con el ítem de nacionalización, ya que no vivió 5 años consecutivos en Nicaragua como lo exige la FIFA, lo que obligó a CONCACAF a entrar en oficio en el mencionado caso.
Nicaragua será reemplazado por Trinidad y Tobago y le genera un problema mayúsculo a Marco Antonio Figueroa, quien por estos días se encuentra en Sudamérica a la espera de los compromisos amistosos ante Uruguay y Paraguay.